La Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), que le mide el pulso a las situaciones de violencia y atiende emergencias humanitarias en los países que hace presencia, publicó esta semana su informe bimensual sobre Colombia. Según sus reportes, en los dos primeros meses de 2020, un total de 6.731 personas sufrieron desplazamiento forzado en todo el país y otras 3.437 personas estuvieron confinadas por la guerra.
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En los desplazamientos forzados diferentes actores armados llegan al lugar, imponen su ley y obligan a las comunidades a huir para salvaguardar sus vidas. Estos episodios se concentraron, dice la OCHA, en cinco departamentos: Norte de Santander, Antioquia, Chocó, Nariño y Caquetá. A su vez, se concentraron en zonas específicas de esos departamentos. En Antioquia, por ejemplo, en la región del Bajo Cauca; en Nariño, hacia el occidente, casi llegando la costa del Pacífico, en municipios como Olaya Herrera, Roberto Payán y Magüí Payán. En los otros tres departamentos solo se registró un desplazamiento.
Otro tipo de emergencia humanitaria que registra la OCHA es el confinamiento. Según la Ley de Víctimas de Colombia esta conducta “implica la restricción de la movilidad de un sujeto o un grupo por una zona geográfica específica causado por amenazas de grupos ilegales, situación que acarrea la falta de acceso a bienes indispensables para la supervivencia personal y del grupo”. Los tres episodios de confinamiento que se registraron en los primeros 60 días del año tuvieron un denominador común: todos ocurrieron en Chocó. Uno de ellos en El Litoral del San Juan, otro en Bojayá, y uno más en el Medio Atrato.
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En esta infografía puede ver todos los datos: