Es peligroso dejar en manos del Presidente elección de Fiscal: Alianza Ciudadana
El ex canciller Augusto Ramírez Ocampo dijo que el único error de la constituyente fue no exigir que el Fiscal fuera penalista.
El Espectador
El vocero de la Alianza Ciudadana por la Democracia y ex canciller de la República, Augusto Ramírez Ocampo, dijo que sería muy peligroso concentrar en el Presidente de la República la exclusiva competencia para elegir al Fiscal General de la Nación.
Añadió que el único error de quienes redactaron la Carta Política de 1991 fue no haber exigido que el jefe del ente acusador fuera abogado penalista, pero que, en cambio, fue sabio haber consagrado su elección a los poderes Ejecutivo y Judicial y que sería inconveniente dar trámite a reformas constitucionales, en ese sentido.
Dijo que es evidente que la persecución en contra de los magistrados de las altas cortes, adelantada desde organismos de inteligencia del Estado, tiene por objeto reducir la independencia del poder judicial y que no hay duda de que el centro de ese cataclisma está en la Casa de Nariño.
El ex canciller respaldó el papel que hasta ahora han cumplido los más altos órganos de la Justicia, como es el caso de la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia, a la que calificó como un paradigma contra el delito.
Precisó que los hostigamientos y los intentos por desprestigiar a los jueces de la República demuestran un sombrío interés de hacer de esta una sociedad policiva, que hace recordar lamentables "autocracias de otros países".
Manifestó que el reto para el Gobierno entrante será trabajar por el sostenimiento de la independencia de los poderes del Estado y en corregir los yerros de la actual administración, como el hecho de fusionar carteras ministeriales, con el fallido propósito de disminuir el déficit fiscal.
En el caso de los Ministerios de Justicia y del Interior, indicó, terminó politizándose el manejo de los asuntos judiciales y judicializándose los políticos, al tiempo que manifestó que no fue menos equívoca la decisión de unir las carteras de la Salud y del Trabajo.
El vocero de la Alianza Ciudadana por la Democracia y ex canciller de la República, Augusto Ramírez Ocampo, dijo que sería muy peligroso concentrar en el Presidente de la República la exclusiva competencia para elegir al Fiscal General de la Nación.
Añadió que el único error de quienes redactaron la Carta Política de 1991 fue no haber exigido que el jefe del ente acusador fuera abogado penalista, pero que, en cambio, fue sabio haber consagrado su elección a los poderes Ejecutivo y Judicial y que sería inconveniente dar trámite a reformas constitucionales, en ese sentido.
Dijo que es evidente que la persecución en contra de los magistrados de las altas cortes, adelantada desde organismos de inteligencia del Estado, tiene por objeto reducir la independencia del poder judicial y que no hay duda de que el centro de ese cataclisma está en la Casa de Nariño.
El ex canciller respaldó el papel que hasta ahora han cumplido los más altos órganos de la Justicia, como es el caso de la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia, a la que calificó como un paradigma contra el delito.
Precisó que los hostigamientos y los intentos por desprestigiar a los jueces de la República demuestran un sombrío interés de hacer de esta una sociedad policiva, que hace recordar lamentables "autocracias de otros países".
Manifestó que el reto para el Gobierno entrante será trabajar por el sostenimiento de la independencia de los poderes del Estado y en corregir los yerros de la actual administración, como el hecho de fusionar carteras ministeriales, con el fallido propósito de disminuir el déficit fiscal.
En el caso de los Ministerios de Justicia y del Interior, indicó, terminó politizándose el manejo de los asuntos judiciales y judicializándose los políticos, al tiempo que manifestó que no fue menos equívoca la decisión de unir las carteras de la Salud y del Trabajo.