Carlos Correa, quien era alto consejero para las regiones del gobierno Santos, está siendo investigado por la Fiscalía por posibles irregularidades de contratación del Coliseo Miguel Happy Lora y la construcción y remodelación de la Villa Olímpica de Montería mientras ejercía como alcalde de Montería, entre 2012 y 2015. En la última semana de junio pasado, la Fiscalía le imputó cargos por estos hechos, y Correa los negó.
El alto funcionario, recién nombrado director del Findeter en el último revolcón del gabinete del presidente Santos de hace un par de días, es investigado por los delitos de peculado por apropiación, celebración de contratos sin el cumplimiento de los requisitos legales, interés indebido en la celebración de contratos, prevaricato por omisión y falsedad ideológica en documento público. Según informó Blu Radio, el llamado a juicio está listo. Lo que quiere decir que la Fiscalía solicitaría prontamente una audiencia de acusación.
Correa, por su parte, ha defendido su “total transparencia” en sus actuaciones como mandatario de la capital de Córdoba. Una vez conoció de la orden de captura en su contra, Correa se presentó voluntariamente ante las autoridades y la jueza que evaluó su detención determinó que no se justificaba privarlo de la libertad mientras la investigación continuaba. Por este tema, además de Correa, también hay un expediente del alcalde de Montería, Marcos Pineda.