Aunque la Corte Suprema había ordenado que el caso del ex congresista Luis Fernando Almario fuera enviado a un juzgado de Bogotá para evitar problemas de conflicto de competencia, el Consejo Seccional de la Judicatura había revocado esa decisión, ordenando que fuera enviado de vuelta para su ciudad natal.
La familia Turbay Cote envió un comunicado desde el asilo político donde se encuentra, mostrando su preocupación por el posible envío del caso a un juzgado de Florencia, pues temían se quedara en la impunidad la muerte de varios miembros de la familia, presuntamente por orden de Almario.
"Me refiero a la decisión que va a tomar el Consejo Superior de la Judicatura acerca de la jurisdicción en donde se adelantará el proceso penal en el que está involucrado el autor intelectual del asesinato de mi madre, mi hermano y sus cinco acompañantes", según la carta firmada desde Zúrich (Suiza) por Constanza Turbay Cote, integrante de la familia, el 10 de marzo de 2009.
El ex congresista deberá entonces enfrentar el juicio por la muerte de los integrantes de la familia Turbay Cote, por estar presuntamente involucrado en los hechos como autor intelectual, tal como lo había ordenado la Corte Suprema de Justicia.
Gerardo Aguirre Ballesteros, ex jefe de un frente de las Farc en el Caquetá, denunció ante la Fiscalía como el ex congresista había delegado a un emisario para orgnizar la muerte de la familia Cote Turbay.
Almario, del Partido Conservador, está detenido desde febrero por el delito de homicidio agravado, imputado por las muertes de Inés Cote de Turbay y su hijo, el entonces congresista, Diego Turbay, quienes fueron atacados el 29 de diciembre de 2001 en una carretera del departamento de Caqueta, cerca a Puerto Rico.
Por El Espectador
