La Policía trasladó a Harold Echeverry Orozco, confeso feminicida de Michelle Dayana González, la menor de 15 años que fue asesinada en Cali por este exmilitar el pasado 7 de diciembre. El criminal será enviado a la cárcel de Cómbita, en Boyacá, luego de que el pasado 12 de diciembre el hombre confesara el feminicidio ante un juez. Las autoridades del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec) lo llevaron desde la URI de Villavicencio hasta la penitenciaría de mediana y máxima seguridad de El Barne, donde será recluido en un pabellón donde estará aislado.
La Fiscalía le imputó cargos a Echeverry Orozco por el feminicidio de Michel Dayana y, aunque la diligencia fue privada, fuentes cercanas al proceso revelaron detalles hasta ahora desconocidos de los otros tres casos de presunta violación a menores de edad.
(En contexto: Caso Michel Dayana: Harold Echeverry aceptó cargos de feminicidio)
Uno de ellos es que, apenas dos días antes de la desaparición y feminicidio de la niña de 15 años, ocurrido el pasado 7 de diciembre, Echeverry Orozco habría violado a otra menor, también en el mismo taller donde desmembró a Michel Dayana. Ese caso salió a flote cuando la Fiscalía empezó a escarbar en el pasado del feminicida para armar el proceso en su contra y pedirle al juez del caso que lo enviara a la cárcel.
Lea: Días antes de asesinar a Michel Dayana, Harol Echeverry habría violado a otra niña
Aunque ya se sabía que el feminicida estaba en juicio por un caso similar, durante las audiencias en su contra, el fiscal José Reinaldo Cañón reveló nuevos pormenores. Los hechos ocurrieron el 4 de abril de 2019 en Cali, cuando Echeverry trabajaba en una veterinaria.
De acuerdo con fuentes del caso, la Fiscalía presume que Echeverry Orozco sí violó a Michel Dayana, pues además de todos los antecedentes judiciales, el hombre tenía rasguños en su cara y un golpe en uno de sus pómulos “que darían cuenta que la niña se intentó defender con todas sus fuerzas”, explicó el ente investigador.
El problema es que, por ahora, la Fiscalía no tiene un respaldo científico para presentarle al juez, pues el cuerpo de la menor “sufrió una desmedida violencia que imposibilita determinar esta situación”.
Para conocer más sobre justicia, seguridad y derechos humanos, visite la sección Judicial de El Espectador.
