Los familiares del ex paramilitar y presunto narcotraficante, Daniel Rendón Herrera, alias "Don Mario", podrían ser cobijados por algún programa especial de protección a testigos, según lo informó la Fiscalía General de la Nación.
Luis González, jefe de la Unidad de Justicia y Paz dijo que se está sometiendo a debate la posibilidad de acoger favorablemente la petición de "Don Mario", quien denunció que su familia, como la de otros ex comandantes paramilitares, ha estado sometida a constantes hostigamientos y persecuciones, que ponen en riesgo la vida de quienes integran el núcleo.
"Se está evaluando la planeación de medidas de seguridad para la familia de este hombre como ubicación en el exterior, protección en Colombia, cambio de identidad, entre otras herramientas que ofrece el sistema para brindarles máxima seguridad", advirtió el representante del ente acusador e investigador.
Al parecer, las declaraciones del presunto narcotraficante han generado traumatismo en algunos sectores hostiles, que lo tienen en la mira desde hace varios meses, como lo admitió la fiscal Quinta de Justicia y Paz, Elva Beatriz Silva Vargas, quien hizo referencia a las amenazas que recaen sobre "Don Mario" en la actualidad.
En esa advertencia también se da cuenta de varios de los señalamientos que Rendón Herrera ha hecho en torno a la alianza estratégica que mantenían los paramilitares con la clase dirigente, especialmente en los Llanos Orientales.
Dentro de las revelaciones que hizo a lo largo de su declaración en Justicia y Paz, se cuenta la acusación al ex gobernador del Meta, Edilberto Castro, advirtiendo su participación en el crimen del ex candidato a esa Gobernación, Euser Rondón.
Adicionalmente, "Don Mario" hizo referencia a las actividades delictivas que desarrollaban el zar de las esmeraldas, Víctor Carranza, en asocio con los hermanos Víctor y Miguel Ángel Mejía Múnera, conocidos con el alias de "Los Mellizos", tanto como al suicidio por el que habría optado el ex comandante paramilitar, Vicente Castaño.
De momento, la Fiscalía ha admitido que las declaraciones del acusado son suficientes para poner en consideración la veracidad de sus denuncias respecto a las amenazas, y de ahí que el tema ya se haya empezado a analizar.
Por El Espectador
