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Ante el juez 31 de garantías, los representantes de la Fiscalía y la Procuraduría General solicitaron que el joven Fabio Andrés Salamanca Danderino sea enviado a un centro especial para conductores para que cumpla la medida de aseguramiento con la que fue cobijado el pasado martes.
En su intervención, el fiscal indicó que por motivos de seguridad el joven de 23 años debe estar recluido en un centro especial puesto que existen registros de amenazas contra su integridad personal.
Igualmente señaló que al revisar los medios de comunicación y las redes sociales se puede registrar las graves condiciones de seguridad personal que tiene su cliente puesto que no son pocas las intimidaciones que ha recibido Salamanca Danderino y los miembros de su familia.
“Tiene que entenderse que pese a la tipificación esto es un accidente de tránsito porque la ley lo dice cuando interviene un vehículo y hay personas muertas es un accidente de tránsito”, precisó el fiscal 43 de la Unidad de Vida.
En este sentido señaló que la ley colombiana indica en sus apartes que se debe velar por el respeto de la dignidad humana y se prohíbe cualquier tipo de forma de violencia física, cívica o moral.
En su intervención el fiscal aseguró que existen elementos materiales probatorios que hacen referencia a esas amenazas por lo que le pidió que al momento de enviar al Inpec “a este muchacho para que cumpla su detención sea enviado a una cárcel de conductores”.
Y es que para la Fiscalía, no existe justificación para que el joven de 23 años sea enviado a un centro como La Modelo o La Picota “esto no va a servir para nada ni resocialización ni nada”.
Finalmente indicó que en la mañana de este miércoles, después de que se entregara a las autoridades, Salamanca Danderino fue sometido en la seda del búnker de la Fiscalía a una serie de exámenes psiquiátrico y médicos, y se le explicaron sus derechos.
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