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La Sala Disciplinaria del Consejo Superior de la Judicatura dejó en firme la sanción de por vida al exasesor jurídico del Grupo Nule, Álvaro Dávila, quien actualmente enfrenta un proceso penal por su presunta participación en tres delitos dentro del denominado ‘carrusel de la contratación’ en la capital de la República.
Al revisar el recurso de apelación presentada por el abogado, el alto tribunal ratificó la suspensión de la tarjeta profesional de Dávila emitida por el Consejo Seccional de la Judicatura al considerar que incurrió en una serie de actividades contrarias a la ley, el derecho y la profesión. Esto al considerar que la sanción de primera instancia era acertada.
“Se había condenado por unos cargos graves de mala fe en el ejercicio de la profesión y fraudulento de la misma en unos casos que están en el entorno del llamado carrusel de la contratación de Bogotá, en los que están involucrados el Grupo Nule y el exalcalde Samuel Moreno”, precisa uno de los apartes de la decisión al hacer referencia a las irregularidades en los procesos de licitación y entrega de multimillonarios contratos viales en los que estuvo inmerso el jurista.
En el fallo también se deja la multa de 100 salarios mínimos legales mensuales vigentes debido al daño al patrimonio causado con su conducta al Distrito. “Se trata de una conducta antiética de una gravedad desbordante, en la medida que, con las acciones de mala fe del investigado, se trató de perjudicar el patrimonio del Distrito Capital y se puso en aprietos la movilidad de la ciudad por varios años”.
Actualmente el abogado se encuentra privado de la libertad y enfrenta un proceso penal por los delitos de concierto para delinquir agravado en concurso con interés indebido en la celebración de contratos y cohecho propio dentro del proceso que se adelanta por el desarrollo irregular de obras en la malla vial de Bogotá.
Según la investigación de la Fiscalía General, utilizando su posición social y su cercanía con funcionarios de la Alcaldía de Bogotá para presionar el nombramiento de directivas del IDU con el fin de que se manipularan los pliegos de condiciones para favorecer al Grupo Nule.
Pruebas documentales y testimoniales pudieron verificar que el abogado de los fue participe activo en los contratos 071 y 072 de malla vial y 091 y 093 de contratación de la fase III de TransMilenio por la calle 26 para que le fueran otorgado a los empresarios, quienes ya fueron condenados por los delitos de peculado por apropiación, cohecho, concierto para delinquir, falsedad en documento privado y fraude procesal.