Juicio contra Álvaro Uribe: expresidente habló por segundo día consecutivo

La defensa del expresidente Álvaro Uribe Vélez continúa con el interrogatorio al exmandatario, quien encabeza la larga lista de testigos que presentarán a la justicia para tratar de demostrar que su prohijado es inocente del supuesto fraude procesal, soborno y manipulación de testigos que lo tienen sentado en el banquillo de los acusados. Este es su segundo y último día declarando, antes de darle paso a su hermano, Santiago Uribe, quien también fue citado dentro de los 75 testigos que declararán en esta nueva fase del proceso.

Suspenden audiencia con el expresidente Álvaro Uribe como testigo

El extenso interrogatorio de la defensa del expresidente a su propio cliente ha sido tan extenso que en dos días seguidos de intervención del exjefe de Estado, no se ha terminado de escucharlo. El abogado Jaime Granados le pidió a la jueza 44 Penal de Bogotá que finalice la diligencia de este martes y se finalice con la última parte de la intervención de Uribe Vélez desde la mañana del próximo miércoles 7 de mayo.

A lo largo de su intervención en su segundo de declaración, Uribe asegura que está enjuiciado no porque, según él, haya pruebas en su contra, sino porque, sería víctima de un “atentado político-judicial”. El expresidente dijo en la audiencia de este martes que ha “recibido todos estos atentados político-judiciales. Acá no hubo un atentado material de las Farc como tantos, pero sí hubo un atentado político-jurídico de personas allegadas a las Farc que me pensaban llevar a la cárcel en el proceso electoral”.

El expresidente Uribe también pidió en la audiencia que se investigue la supuesta participación de la extinta guerrilla de las Farc en el proceso en su contra.

Dentro de los temas que el expresidente Uribe ha respondido en la audiencia, se refirió a los supuestos ofrecimientos que le habría hecho su exabogado Diego Cadena a exparamilitares para que cambiaran sus testimonios y los hicieran a favor de Uribe. Señaló que nunca dio órdenes de que se buscara a ninguna persona para hacerle ofrecimientos, sino que pidió contrastar la información y que eso fue lo que le solicitó a su entonces defensor.

Insistió que todo entro del proceso lo hizo de manera pública y que los señalamientos que se le han hecho de tener relación con el paramilitarismo y con los delitos que lo tienen en el banquillo de los acusados serían un complot del senador Iván Cepeda. También aseguró que las pruebas que hay contra su exabogado fueron obtenidas por un “entrampamiento” en contra de Cadena.

Uno de los puntos que más se ha cuestionado a lo largo del proceso en contra del exmandatario ha sido el uso de la hacienda Las Guacharacas, antigua propiedad de la familia Uribe Vélez, como cuna del Bloque Metro de las Autodefensas Unidas de Colombia (Auc). Sobre la finca, el expresidente aseguró en la audiencia que fue vendida un año después del asesinato de su padre a manos de las Farc en 1983. Aseguró que una pequeña parte del predio fue entregada a su hermano Santiago y que la totalidad de la finca fue quemada por el ELN en 1996, cuando él era gobernador, y la familia decidió venderla en su totalidad.

A las 8:30 a.m. de este martes, el abogado Jaime Granados retomó el interrogatorio a su defendido, el expresidente Álvaro Uribe Vélez, quien es el primero de la lista de 75 testigos que citó la defensa del exmandatario. Al inicio, Granados manifestó que la cantidad de preguntas que tiene pendientes para responder Uribe Vélez son tantas que probablemente requieran un tercer día para que el expresidente declare.

Inicialmente, el abogado Granados le preguntó a Uribe sobre los señalamientos que desde 2014 hizo Iván Cepeda en contra de Uribe, con testimonios de exjefes paramilitares que sostuvieron que el exmandatario ayudó a la creación y funcionamiento de grupos al margen de la ley. Según Uribe, nunca buscó testigos para intentar que cambiaran sus testigos, sino para verificar que la información sobre esas declaraciones que presentaba Cepeda eran ciertas.

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