Este jueves 22 de mayo comenzó la jornada 44 del juicio contra el expresidente Álvaro Uribe Vélez, quien enfrenta un proceso por los delitos de soborno en actuación penal, fraude procesal y manipulación de testigos.
Durante la audiencia, la defensa del exmandatario, encabezada por el abogado penalista Jaime Granados, presentó como testigo a Álvaro Hernán Prada, actual magistrado del Consejo Nacional Electoral y exrepresentante a la Cámara por el Huila. Prada está vinculado a este caso por su presunta participación en los mismos hechos que comprometen al expresidente, particularmente en la supuesta búsqueda de testigos a favor de Uribe en 2018.
Prada también enfrenta una investigación penal ante la Corte Suprema de Justicia por presunta manipulación de testigos, derivada de su posible participación en acercamientos con el exparamilitar Carlos Enrique López, alias Caliche, quien habría actuado como intermediario para influir en declaraciones que beneficiaran al expresidente Uribe.
En la audiencia anterior, del martes 20 de mayo, declararon tres testigos de la defensa: Carlos Fernando Salazar, experto de la firma CSF Investigaciones, presentó análisis documentales; Óscar Valero Loaiza, quien intervino tanto como testigo como perito forense; y Óscar Antonio Monsalve, padre del exparamilitar condenado Juan Guillermo Monsalve, considerado el testigo principal de la Fiscalía en este proceso.
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Monsalve padre relató que trabajó desde los años ochenta en la finca La Manada y luego en Guacharacas, propiedad de la familia Uribe Vélez, ubicada en Antioquia. Señaló que su hijo Juan Guillermo también trabajó en esa finca tras ser adquirida por el ganadero Luis Alberto Villegas, investigado por vínculos con las Autodefensas.
Sobre sus vínculos con el senador Iván Cepeda, Monsalve relató que tuvo al menos dos encuentros con él. Afirmó que Cepeda le ofreció apoyo económico por tres meses y la posibilidad de asilo político en Argentina. Según su versión, el senador buscaba información sobre supuestas actividades ilícitas en la finca Guacharacas. “Nos preguntó cuánta coca salía de la cocina que Álvaro Uribe tenía en Guacharacas. Yo le respondí que solo había una cocina y era donde mi señora nos hacía la comida a nosotros”, declaró.
Movimientos en la lista de testigos
Durante la audiencia del día 44, el abogado Granados informó que su testigo Hamilton Mosquera ha rechazado comparecer ante la jueza Sandra Liliana Heredia, por lo que solicitó que se ordene su presentación por parte de la Policía. Además, la defensa del expresidente anunció que renunciará a presentar como testigos a Juan Guillermo Villegas, Franklin Castañeda y Carlos Enrique Vélez, alias Víctor.
Los chats de Prada y alias “Caliche”
El excongresista Álvaro Hernán Prada aseguró que fue contactado por alias Caliche debido a su cercanía con el exmandatario. Según su relato, Caliche le dijo que Juan Guillermo Monsalve —testigo clave en el caso— estaba dispuesto a grabar un video para hacerlo llegar a Uribe y a su defensa.
Durante la audiencia, el abogado Granados presentó una serie de documentos y audios al testigo. En medio de ese ejercicio, la jueza Sandra Liliana Heredia llamó la atención a uno de los miembros del equipo de defensa, identificado como el abogado Barraza, por mostrar al testigo una conversación de chat sin autorización formal.
“Le están poniendo una conversación vía chat. Doctor Barraza, por favor, seriedad en los documentos que le están poniendo de presente. ¿Cómo es eso?”, reprochó la jueza. Granados señaló que no había solicitado la presentación de ese chat, mientras que Barraza explicó que fue enviado por el investigador Franklin Guevara con el fin de facilitar la identificación de un audio destinado a Prada.
En su testimonio, Prada negó haber puesto en altavoz una llamada con el expresidente Uribe durante un desplazamiento en carro por Neiva, contradiciendo la versión de Carlos López, testigo de la Fiscalía, quien declaró: “El man llegó al viejo y lo puso en altavoz, yo lo escuché directamente”. Esa versión también fue desmentida por Rodrigo Vidal Perdomo, otro de los presentes en el vehículo, quien le manifestó a la jueza que nunca se activó el altavoz.
Prada relató que, días después, durante su campaña política en Neiva, volvió a ver a López, pero evitó acercarse porque ya no confiaba en él, dado que nunca recibió el video prometido. Indicó que no le mencionó ese episodio al expresidente Uribe hasta que decidió interponer una denuncia por unas columnas de opinión que lo señalaban falsamente de haber visitado la cárcel La Picota para presionar a Monsalve.
A raíz de esas publicaciones, según relató el testigo, decidió recopilar los chats que había intercambiado con Carlos López. Estas conversaciones fueron presentadas en la audiencia de este jueves por el abogado Granados. Los mensajes, fechados desde el 20 de febrero de 2018, revelan que Prada y López discutieron sobre un encuentro en el que este último entregaría la supuesta grabación de Monsalve.
Prada dijo que terminó por desentenderse del tema debido a que López le enviaba mensajes contradictorios y fallaba en lo pactado. Afirmó que incluso se encontraron en persona, pero decidió no recibir ningún material. Para el 24 de febrero, López le habría advertido que Monsalve estaba siendo amenazado para que no hablara.
El testigo concluyó que, por las inconsistencias y contradicciones, tanto López como Monsalve parecían estar actuando coordinadamente para involucrar al expresidente Uribe.
Comienza el interrogatorio a Álvaro Hernán Prada
El abogado defensor, Jaime Granados, comenzó el interrogatorio con preguntas sobre la trayectoria política de Prada, quien mencionó haber ocupado varios cargos públicos y reconoció públicamente su cercanía y admiración por Uribe Vélez, a quien calificó como un “maestro” con quien ha compartido espacios políticos.
Durante su declaración, Prada se refirió a varias personas mencionadas en el proceso, entre ellos Hugo Tovar Marroquín, abogado que, según el testigo, tuvo participación en campañas tanto del Partido Liberal como del Conservador. También habló de Rodrigo Vidal Perdomo, a quien conoció en Garzón (Huila) durante una campaña electoral en 2013.
Uno de los puntos clave de su intervención fue la mención a Carlos Enrique López, alias Caliche, señalado por la Fiscalía como intermediario en la supuesta manipulación de testigos a favor del expresidente. Prada sostuvo que conoció a López de manera casual el 20 de febrero de 2018 en el aeropuerto de Neiva, donde fue abordado por tres personas, entre ellas López, a quien dijo no haber visto antes.
Según la Fiscalía, el expresidente Uribe habría enviado a su abogado Diego Cadena a distintas cárceles en 2018 para buscar testigos que lo desvincularan de la presunta creación del Bloque Metro de las Autodefensas en la finca Guacharacas, ofreciendo a cambio beneficios judiciales y promesas de ingreso a la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP). Uribe ha rechazado esas acusaciones y ha insistido en que su único interés fue que se conociera la verdad.
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