Día 41: alias “Castañeda” señaló a Cepeda de buscarlo para testificar contra Uribe

Expresidente Uribe en el juicio que se adelanta en su contra en los juzgados de Paloquemao.

Foto: Óscar Pérez

Este viernes 16 de mayo inició la audiencia número 41 del juicio que se adelanta contra el expresidente Álvaro Uribe Vélez por los delitos de presunto fraude procesal, soborno y soborno en actuación penal. Hoy al estrado de los testigos pasó de primero el abogado Wilser Darío Molina, actual alcalde de Amagá (Antioquia) y uno de los testigos clave llamados por la defensa.

Durante su intervención, Molina se refirió a su cliente, el exparamilitar Luis Arnulfo Tuberquia, conocido con el alias de Memín, y aseguró que el senador Iván Cepeda habría visitado a dos exintegrantes de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) con el objetivo de que rindieran declaraciones en contra del exmandatario. Estas afirmaciones hacen parte de la estrategia de la defensa para sustentar su tesis de que Uribe no manipuló testigos, sino que, por el contrario, ha sido víctima de una campaña para desprestigiarlo.

El proceso judicial avanza con la comparecencia de más testigos propuestos por la defensa del líder del Centro Democrático. En la audiencia de ayer, jueves 15 de mayo, declararon el exministro de Agricultura Andrés Felipe Arias y el exfiscal general Néstor Humberto Martínez.

Ambos fueron citados por el abogado Jaime Granados, quien lidera la defensa del expresidente y ha indicado que, de los 75 testigos inicialmente anunciados, 20 ya han sido escuchados y dos han desistido de testificar, uno de ellos el hermano del expresidente, Santiago Uribe, absuelto por el caso de los 12 Apóstoles.

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Para la jornada de este viernes, también declaró la exfiscal Hilda Niño, quien sostiene que existió un supuesto complot dentro de la Fiscalía General, durante la administración de Eduardo Montealegre, para afectar judicialmente a Uribe Vélez. Luego, compareciendo de manera virtual desde Medellín (Antioquia), habló el exparamilitar Gabriel Muñoz, alias Castañeda. La audiencia cerró con el testimonio del abogado Leonardo de Jesús Agudelo.

La intervención del último testigo, el abogado Leonardo de Jesús Agudelo, fue corta. Agudelo respondió al defensor Jaime Granados que había acompañado al expresidente Uribe en varios momentos de su trayectoria política como gobernador, presidente y senador: “siempre he estado en su línea política, porque estoy convencido de que es lo que más le conviene al país”, aseguró.

Luego respondió a Granados que había conocido al abogado Wilser Molina en 2014. “Un día cualquiera él (Molina) me dice que quiere hablar con el doctor Uribe”, relató Agudelo, y agregó que Molina tenía que contarle a el exmandatario “una información muy delicada”, que debía “dársela a él directamente”.

Esta presunta información fue contada por el propio Molina horas antes en esta jornada: el senador Iván Cepeda habría visitado a dos exintegrantes de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) en la cárcel de máxima seguridad de Itagüí, con el objetivo de que rindieran declaraciones en contra del exmandatario. Agudelo ayudó a Molina a conseguir la cita y lo acompañó a ver al exmandatario, quien, según el relato del testigo, le pidió a Molina que le trajera los testimonios de los exparamilitares por escrito.

Agudelo testificó que a las dos semanas volvió con el abogado Molina a visitar a Uribe. En esa ocasión, Molina le entregó los testimonios que llevaba recopilados en un sobre de manila, y el “doctor Álvaro Uribe le dio las gracias y ahí terminó la reunión”, cerró Agudelo. La fiscal del caso, Marlenne Orjuela, no hizo ninguna pregunta en el contrainterrogatorio y así de dio por terminada la intervención del testigo Leonardo Agudelo.

Gabriel Muñoz, alias Castañeda, hizo parte del Bloque Metro de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC). De acuerdo con el testimonio del primer testigo de hoy, el abogado Wilser Molina, Muñoz conoció al exparamilitar Luis Arnulfo Tuerquia, alias Memín, en la cárcel de Itagüí (Antioquia).

A través de Tuerquia, Castañeda logró contactarse con el abogado Molina para decirle que el senador Iván Cepeda le ofreció beneficios para que implicara a Uribe en nexos con paramilitares. Además, señaló que Cepeda llegó a contactarse con él a través de su abogada Mercedes Arroyave, a la que señaló de presionarlo para que accediera a testificar.

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Estando en la cárcel de Itagüí, “la señora Mercedes un lunes, o un martes, me dijo: Don Gabriel, el doctor Iván Cepeda necesita hablar con usted. Yo le dije: ¿qué va a hablar conmigo?.” Me dijo: No, venga, vamos, que a usted le conviene. Como era la abogada mía le dije: Ah, bueno, doctora, vamos. Y salí“, luego, Castañeda relató que fue movido del patio a la oficina del director del penitenciario. “Allá estaba el doctor Iván Cepeda con dos escoltas. La doctora Mercedes fue la que me llevó”, aseguró Muñoz.

El exparamilitar siguió narrando que Arroyave lo presentó a Cepeda, y el senador le dice que lo mando a llamar: “para que usted me hable de Álvaro Uribe”. “¿Y yo que tengo que hablar de Álvaro Uribe de todo esto?”, le preguntó Muñoz. En ese momento, Arroyave “metió la cucharada” y le dice a su cliente: “Don Gabriel, hable lo qué tenga que decir”.

El testigo aseguró que el senador le entrego un papel con unas palabras que tenía que aprenderse, y que luego él volvería a la cárcel para escucharlo declararlas contra el exmandatario. Muñoz dice que se negó: “yo no tengo nada que decir del doctor Álvaro Uribe”.

La exfiscal Hilda Niño Farfán es la segunda testigo de esta jordana 41. Su nombre es clave dentro del expediente judicial, debido a que habría recibido ofrecimientos de beneficios a cambio de favorecer a Santiago Uribe Vélez, hermano del expresidente Álvaro Uribe, en los procesos penales que enfrentaba por su presunta vinculación con el grupo paramilitar Los 12 Apóstoles.

Además, Niño aseguró que durante las administraciones de Eduardo Montealegre y Jorge Fernando Perdomo en la Fiscalía, se habría orquestado una persecución judicial contra los hermanos Uribe Vélez. No obstante, dichas afirmaciones no han sido comprobadas en sede judicial, razón por la cual Montealegre y Perdomo fueron reconocidos como víctimas en este proceso.

Hilda Niño fue capturada en junio de 2017 por recibir sobornos de exnarcotraficantes, a quienes habría ayudado a manipular procesos judiciales y facilitar su ingreso al sistema de Justicia y Paz. Desde 2020, goza de libertad condicional. En su más reciente intervención, Niño reiteró que en su momento le reveló al abogado Diego Cadena la existencia de un supuesto plan dentro de la Fiscalía para vincular a Santiago Uribe con estructuras armadas ilegales en Antioquia.

El actual alcalde de Amagá (Antioquia), Wilser Darío Molina Molina, entregó su versión sobre hechos que conoció mientras ejercía como abogado penalista. Durante su intervención, Molina relató que en 2014, durante una visita a la cárcel de máxima seguridad La Paz, en Itagüí, fue contactado por su entonces cliente, Luis Arnulfo Tuerquia, alias Memín, quien le pidió hablar con dos internos que querían hacerle una grave revelación.

Se trataba de Ramiro de Jesús Henao, alias Simón, y Gabriel Muñoz, alias Castañeda, ambos exintegrantes del Bloque Metro de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC). Gabriel Muñoz también fue llamado a declarar en esta jornada.

Según el testimonio del alcalde, los dos exparamilitares le confesaron haber recibido, años atrás, ofrecimientos directos del senador Iván Cepeda para que declararan en contra del expresidente Uribe, vinculándolo con un supuesto asesinato ordenado por él cuando era gobernador de Antioquia.

“Ellos me manifestaron que el señor Cepeda, acompañado de la abogada Mercedes Arroyave, los visitó en la cárcel bajo el pretexto de hablar sobre unas fosas comunes que pretendían entregar a la justicia. Sin embargo, una vez en la oficina del director del penal —quien fue retirado del lugar para dejar a solas al senador, la abogada y los internos—, Cepeda habría hecho una propuesta muy distinta”, declaró Molina ante el juez.

Según el relato de los exparamilitares, el senador Cepeda les habría entregado un texto con una versión que debían memorizar y narrar ante las autoridades judiciales. En dicho libreto, se les pedía afirmar que habían asesinado a un comandante del ELN por orden de Álvaro Uribe Vélez. A cambio, les habrían ofrecido beneficios carcelarios, un trato preferencial en prisión y la posibilidad de obtener asilo político para ellos y sus familias en Argentina.

Molina aseguró que los exparamilitares ya habían intentado poner en conocimiento de la Fiscalía esta denuncia, pero sus declaraciones no fueron tenidas en cuenta. El abogado añadió que era“tema muy delicado que tenía que ver con el señor Iván Cepeda, pero que los fiscales le habían manifestado que eso no les competía a ellos”, añadió el testigo.

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