Ante las preguntas de la Fiscalía General, el físico de la Universidad Nacional, Carlos López aseguró que después de hacer una serie de estudios no encontró una justificación o una explicación razonable para que el cuerpo del joven Luis Andrés Colmenares hubiera sido encontrado de la forma en cómo se halló en el túnel del canal de aguas del parque El Virrey en el norte de Bogotá.
En su testimonio –entregado en el juicio que se adelanta contra Carlos Cárdenas- el perito manifestó que no encuentra “una razón válida” para que el cuerpo del joven de 20 años en la posición en la que fue hallado por los miembros del cuerpo de Bomberos de Bogotá en la noche del 31 de octubre de 2010.
En este punto aseguró que “si el caudal del agua era tan fuerte, el cuerpo hubiera seguido hacia la autopista. Si no lo arrastró desde el inicio”. El testigo fue llamado por la Fiscalía General después de que adelantara estudios sobre las posibilidades de caída y de arrastre del cuerpo de 1.80 metros de estatura y 73 kilogramos de peso.
En dichos estudios, según el físico, se midió la fuerza de arrastre del cuerpo en el canal de aguas, indicando que este tiene que ver con el caudal que presentaba el mismo en el momento de los hechos. “La velocidad de arrastre del cuerpo depende de la lámina de agua (…) la velocidad podría ser entre 2,3 metros sobre segundo y entre 4 a 5 metros sobre segundo, porque el caño es diferente en unas zonas que otras”.
Frente a uno de los puntos clave de su análisis, el físico aseguró que al hacer una medición del lugar donde se dice cayó el joven, su peso y el recorrido que hizo se pueden definir y rechazar ciertas hipótesis. Por ejemplo, el hecho de que si hubiera caído de cabeza Colmenares Escobar habría sufrido una contusión en la parte superior del cráneo lo que habría ocasionado una ruptura cervical.
Estas declaraciones se hicieron en el juicio que se adelanta contra Cárdenas Gómez por su presunta participación en los delitos de homicidio agravado y estafa.
Por El Espectador
