“Respetados y apreciados magistrados, sin duda alguna, uno de los momentos más difíciles que podemos vivir es cuando debemos decir adiós”. Así empezó su texto de despedida la secretaria general de la Corte Constitucional y abogada Martha Sáchica, quien por 31 años recorrió los pasillos del alto tribunal en función de los nueve magistrados que cada ocho años componen la corporación. En una comunicación de tres páginas, Sáchica mostró su agradecimiento a la institución que la acogió, prácticamente, desde que entró en funcionamiento.
“Agradecimiento eterno a todos los magistrados por haberme permitido trabajar durante estos años en la Corte, lo que enriqueció también la actividad académica que he desarrollado por más de cuatro décadas”, resaltó la funcionaria que estará en función de su cargo hasta el próximo 15 de mayo de este año. Sáchica, quien es hermana del magistrado del Consejo de Estado, José Roberto Sáchica, recibió un reconocimiento por la misma alta corporación por su labor y entrega. El reconocimiento se otorgó en medio de la celebración de los 30 años de vigencia del tribunal.
Lea aquí: Adios al maestro de todos los abogados
El año pasado, la secretaria también recibió un premio por parte de la Corporación Excelencia por la Justicia al considerarla “mujer destacada en el sistema judicial” por su dedicación y compromiso con el trabajo de la corporación. Sáchica es abogada de la Universidad del Rosario, con especialización en Derecho Público de la Universidad Externado de Colombia. Además, ha sido profesora titular de Historia Constitucional y Política de Colombia y Derecho Indiano en la Universidad Sergio Arboleda y de Derecho Constitucional en la Universidad del Rosario.
Su conocimiento y experiencia, además de ocuparse de la secretaría general del alto tribunal, la llevó a ostentar cargos dentro de la misma corporación. Por ejemplo, para 2014, fue nombrada como magistrada encargada mientras se definía la situación del hoy exmagistrado Alberto Rojas Ríos a quien el Consejo de Estado le anuló su elección por una irregularidad en los tiempos en los que fue elegido. El encargo de Sáchica duró poco porque a Rojas Ríos finalmente lo ratificaron en su puesto.
Lea también: Veinte años detrás de la Constitucional
Sáchica, en 2012, también aspiró a ocupar una plaza en la Sala Plena. Disputó el puesto en una terna entre el exministro de justicia, Carlos Medellín y el entonces magistrado auxiliar del alto tribunal Luis Guillermo Guerrero, teniendo este último el apoyo del Congreso y dejándolo como magistrado titular. Sáchica, entre otras cosas, ha sido la mano derecha de los más de 20 magistrados que han pasado por el alto tribunal. Además, vio materializadas muchas de las iniciativas que emprendió con su equipo de trabajo.
“En mi oficina y en las instalaciones de la Secretaría en el segundo piso del Palacio de Justicia, ahora despejadas, sin expedientes, limpias, silenciosas, me conmueve profundamente y emociona ver cómo se logró un propósito que teníamos desde 2010, de utilizar la tecnología para prescindir del uso del papel, contribuir con la preservación de nuestros recursos naturales y el ambiente sano y mejorar la eficiencia en las tareas que nos corresponden”, resaltó al ver que ese objetivo se cumplió más rápido de lo que imaginaba. La pandemia por Covid-19 le ayudó en ese empujón.
Lea también: Una elección trascendental
“Comencé a escribir esta carta a propósito, en el lugar desde donde he presenciado más de dos mil quinientas sesiones de la Sala Plena, cerca de ochocientas de ellas en la sede original de la Corte en la Avenida Chile. Con la imaginación, recorro cada una de las sillas en este momento vacías que rodean el hemiciclo y revivo momentos inolvidables de debate y a sus protagonistas, para despedirme en el pensamiento de cada uno de ellos y darles las gracias por haberme permitido estar allí y ser testigo mudo de tantas decisiones que han cambiado a Colombia”, así se despidió de la Sala Plena que hoy la componen nueve magistrados, cinco hombres y cuatro mujeres, a quienes no se les despegó un minuto en medio de las largas discusiones de Sala Plena o en medio de las Salas de Selección de Tutela y otros escenarios en el interior del alto tribunal.
La magistrada Diana Fajardo, actual presidenta del alto tribunal, en nombre de la corporación agradeció su labor por defender “la memoria histórica” de la Corte. “Estamos seguros de que tu trabajo en esta Corte pasará a la historia por ser un ejemplo vivo de liderazgo, discreción, organización, rigurosidad y eficiencia, entre otras virtudes, que también contribuyeron a la ultranza de los derechos fundamentales de las personas y la supremacía de la Carta Política de 1991″, dijo la presidenta.
A Sáchica aun le queda un mes para remembrar lo que fueron las largas discusiones en Sala Plena donde se despenalizó el aborto, se otorgó el derecho de igualdad a miembros de la comunidad LGBTI para que contrajeran matrimonio, la eutanasia, el suicidio médicamente asistido, la despenalización de la dosis personal y la garantía de derechos laborales para el ejercicio de la prostitución, entre muchas otras decisiones trascendentales que ha tomado la Corte Constitucional.
Para conocer más sobre justicia, seguridad y derechos humanos, visite la sección Judicial de El Espectador.