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La errónea información de que existía una indagación preliminar en contra del general Freddy Padilla de León, comandante de las Fuerzas Militares, y el ex ministro de Defensa Camilo Ospina, por el delito de concierto para delinquir, en el caso de los ‘falsos positivos’ o ejecuciones extrajudiciales, levantó ampolla en el Gobierno Nacional. El presidente Álvaro Uribe Vélez, en una ceremonia de ascenso de generales de la Policía que tuvo lugar en la Escuela de Cadetes de Bogotá, rechazó la que, se suponía, era una determinación de la Fiscalía y llamó “tinterillos” e “idiotas útiles” a los presuntos acusadores del alto oficial.
El Primer Mandatario agregó que, una vez se retire del poder el 7 de agosto, pasará a servir como defensor de uniformados. “Cuando termine mi labor como Presidente, y luego de un descanso, desempolvaré la tarjeta profesional que alguna vez me otorgó una prestigiosa universidad para servirles como abogado a las Fuerzas Militares (...) todos los días encuentran la manera de atacar a este Gobierno y no cesan en su empeño”, manifestó Uribe, quien además exigió pronta rectificación de la Fiscalía.
Al final del día, el fiscal general (e), Guillermo Mendoza Diago, explicó en rueda de prensa que el organismo abrió una indagación preliminar a raíz de tres denuncias de ‘falsos positivos’, pero que hasta la fecha ninguna persona —incluidos Ospina y Padilla— se encuentra vinculada a esta investigación. Mendoza le envió una carta al Jefe de Estado haciendo estas aclaraciones, señaló que las actuaciones de la Fiscalía son independientes de la Corte Suprema e indicó que, a su juicio, “tinterillos” fueron llamados los denunciantes y no los funcionarios de la Fiscalía.