El ministro de Defensa de Colombia, Pedro Sánchez Suárez, desmintió las versiones que indican que en las Fuerzas Militares, especialmente en el Ejército, hay una crisis interna por falta de personal. El alto funcionario del gobierno se salió al paso a las versiones que hablaban sobre dicha crisis y aseguró que los planes y estrategias para robustecer las capacidades de las instituciones han dado resultados que se sustentan en las cifras.
“El Ejército Nacional no se ha debilitado. Por el contrario, hemos venido fortaleciendo sus capacidades y aumentando su personal a lo largo y ancho del país”, dijo el ministro Sánchez Suárez. A renglón seguido, aseguró que el Ejército pasó de tener 174.175 uniformados en 2022, a 181.214 en 2025. Una cifra que se logró por medio de la implementación del Plan 16.000, que tiene por objetivo mantener al alza las cifras de incorporación.
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“La Fuerza Pública se está fortaleciendo. El Plan 16.000 y el Plan 20.000 nos han permitido robustecer el poder de combate y ampliar la presencia del Estado en zonas estratégicas. También hemos potenciado nuestras capacidades de inteligencia con una flotilla de más de 900 drones que operarán en el Catatumbo. Hoy tenemos tres helicópteros MI-17 en funcionamiento y esperamos incorporar seis más en las próximas semanas, para cerrar el año con 11 aeronaves activas”, agregó el ministro.
El origen de las denuncias
La polémica por las cifras que indicaban que dentro del Ejército se estaría cocinando una crisis por cuenta de la falta de personal, se dio luego de que el diario El Tiempo publicara datos proporcionados, al parecer, por un informe de la Procuraduría General de la Nación. Según esa publicación, de los años 2021 a 2025 el Ejército habría perdido más de 70.000 efectivos. La situación se habría hecho crítica desde 2023, cuando 206.416 hacían parte de la institución, un número que habría caído a 167.992 en lo que va de 2025.
El Espectador consultó a la Procuraduría sobre el informe que habla de reducción de uniformados en el Ejército; sin embargo, desde la entidad respondieron que no tienen conocimiento sobre dicha información. En su lugar, remitieron información sobre la reciente decisión del Gobierno Nacional de desbloquear recursos para las Fuerzas Militares, por el orden de los $346.066 millones, con el objetivo de garantizar el funcionamiento de las entidades del sector Defensa hasta el cierre de 2025.
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Ese desbloqueo de recursos se dio gracias al acompañamiento de la Procuraduría Segunda Delegada para la Vigilancia de la Función Pública, tras una serie de mesas técnicas en las que participaron también los ministerios de Defensa y Hacienda, las Fuerzas Militares y la Policía. Una decisión que solo está pendiente de la firma del presidente Gustavo Petro al decreto que la oficializa, para que se haga efectiva, en medio de la compleja situación fiscal del Gobierno Nacional y de sus instituciones.
“El Ministerio de Hacienda llevará al Confis la solicitud de desbloqueo de $90.934 millones adicionales, mientras que el despacho de esta delegada realiza el seguimiento al cumplimiento de estos compromisos. La alarmante situación de desfase financiero del sector Defensa, advierte el ente de control, no puede afectar la operatividad y funcionamiento del Ejército y más cuando la situación de orden público que vive el país es bastante compleja”, señalaron desde la Procuraduría.
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Las explicaciones del ministro
El ministro Sánchez Suárez argumentó que, si bien sí se ha registrado la salida de efectivos que pasaron a uso del buen retiro, la situación no alcanza las cifras señaladas. Dijo que en los años 2021 y 2022 salieron soldados profesionales que habían sido incorporados a inicios de los 2000, y que ya cumplieron con su tiempo de servicio. “No son 70 mil los que se han retirado entre 2021 y 2025, como algunos afirman; son cerca de 17 mil. Y ya hemos superado esas cifras gracias al aumento sostenido en nuevas incorporaciones”, dijo Sánchez Suárez.
Agregó que las Fuerzas Militares no solo han logrado sostenerse, sino que están echando mando de nuevas estrategias para atender los requerimientos de la compleja situación de seguridad y orden público que se vive en regiones como Cauca, Valle del Cauca, Guaviare, Chocó y Catatumbo (Norte de Santander).
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Entre esas acciones está la incorporación, por primera vez, de soldados profesionales a la Fuerza Aérea, la ampliación de capacidades de la Escuela de Soldados Profesionales del Ejército y el incremento de la bonificación mensual de quienes prestan su servicio militar, al 70% del salario mínimo. Un aumento que, según proyecciones del Ministerio, se espera que al cierre de 2026 quede en el 100%.
A eso se suma la activación de dos nuevos Gaula militares en el Magdalena Medio y la Orinoquía; así como la creación de ocho nuevas Fuerzas de Despliegue Rápido en las regiones del Bajo Cauca antioqueño, Arauca, Sur de Bolívar, Tolima, Huila, Putumayo, Catatumbo y los Llanos Orientales. Esto, como parte de los cambios hechos en noviembre de 2024 al interior de las Fuerzas Militares, que suprimieron administrativamente las organizaciones conjuntas, con el fin de darle mayor autonomía a cada institución y simplificar los trámites para el desarrollo de operaciones conjuntas.
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“El fortalecimiento de las Fuerzas Militares es una política de Estado. No solo estamos manteniendo nuestras capacidades: las estamos recuperando, modernizando y expandiendo para garantizar el control institucional, proteger la vida y asegurar el orden constitucional en cada rincón del país”, concluyó el ministro Sánchez Suárez.
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