La Fiscalía General acaba de abrir una noticia criminal para adelantar las primeras pesquisas relacionadas con la muerte de María José Ardila, una mujer de 23 años, que falleció después de intentar cumplir un reto en un bar de Cali (Valle del Cauca). El ente investigador busca saber si el bar tendría alguna responsabilidad penal por lo sucedido.
La noticia criminal fue asumida por un fiscal de la Unidad de Vida de la Seccional Cali, el cual está a la espera del informe de necropsia y de los resultados de pruebas toxicológicas, que adelanta Medicinal Legal.
Según las declaraciones de José Ardila, padre de la mujer, el reto que le ofrecieron en la discoteca consistía en ingerir diferentes tragos de licor. De acuerdo con su versión, primero tomarse un “Cucaracho” en cinco segundos, luego tomarse tres tragos y después una cerveza. Posteriormente, tomarse otros tres tragos sin las manos y otros trece segundos de aguardiente sin derramar nada. Finalmente, debía tomarse ocho tragos diferentes con pitillo. Todo esto sin parar.
El lugar proponía el reto a sus asistentes, ofreciendo como recompensa un millón y medio de pesos. “Faltándole como tres o cinco tragos para ganarse el reto, ella se desmaya, se vomita estando desmayada y broncoaspira”, dijo a medios locales el padre de la joven. La joven habría estado sin respiración por varios minutos, mientras la trasladaban a un centro asistencial.
Según a versión de José Ardila, en la sala de reanimación los médicos tuvieron que estabilizarla en varias oportunidades. Los médicos finalmente la intubaron e ingresaron a la unidad de cuidados intensivos (UCI). A pesar de los esfuerzos, se confirmó su muerte cerebral, por lo que la familia decidió desconectarla.
La familia de la mujer anunció que tomaría medidas legales contra la discoteca, pues, según su dicho, el lugar no contaban con atención de primeros auxilios, ni acceso rápido a una ambulancia. También señalan que habría existido negligencia por parte de los dueños del lugar. “Nadie de la discoteca la atendió; llamaron a un amigo porque los taxis no paraban creyendo que la niña iba borracha. Se perdió demasiado tiempo y esto conllevó este resultado”, manifestó el padre de María José Ardila.
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