Paola Solarte, condenada a 6 años y medio de prisión por caso Odebrecht
La empresaria e hija del constructor Carlos Solarte aceptó cargos y tendrá prisión domiciliaria por su condición de madre cabeza de familia.
Redacción Judicial
En los juzgados de Paloquemao, un juez condenó a seis años y seis meses de prisión a Paola Solarte, hija del empresario constructor Carlos Solarte (dueño de la firma CASS Constructores). La mujer, quien tendrá casa por cárcel, fue hallada responsable por las irregularidades que se dieron en la celebración del contrato Tunjuelo- Canoas, obra que tenía como fin descontaminar del Río Bogotá.
El juez del caso avaló el preacuerdo firmado por Solarte en el que reconoció su responsabilidad en los delitos de cohecho por dar u ofrecer, interés indebido en la celebración de contratos y abuso de confianza. Asimismo, le ordenó a Solarte el pago de una multa de 486 salarios mínimos legales vigentes y la inhabilidad para ejercer cargos públicos o contratar con el Estado por 88 meses.
Aunque Paola Solarte en la audiencia de imputación de cargos no aceptó los delitos de peculado por apropiación agravado, interés indebido en la celebración de contratos y cohecho por dar u ofrecer, en el preacuerdo con la Fiscalía sí lo hizo. Por esa aceptación, el ente investigador “degradó” el delito de peculado por apropiación por abuso de confianza y la jueza lo avaló.
“El reconocimiento de la responsabilidad por parte de la incriminada se ajustó a derecho sin que se avizore ninguna violación de garantías fundamentales, ni vicios de consentimiento, como tampoco que se esté concediendo algún beneficio”, precisó en su momento el juez.
Las investigaciones
En las investigaciones de la Fiscalía, en las que también se investiga a su papá, señalan que en 2009 los Solarte pagaron sobornos junto con la firma brasileña Odebrecht para quedarse con el contrato para la construcción del túnel interconector entre el río Tunjuelo, la planta de tratamiento de aguas residuales Canoas y el río Bogotá.
Según la Fiscalía, CASS Constructores y Odebrecht se asociaron en el Consorcio Canoas y pactaron pagar 8,75 % en coimas, de un contrato que estaba tasado en más de $243.717 millones. El dinero, explicó el ente investigador, habría ido a parar a los bolsillos de concejales, contratistas, funcionarios de la Empresa de Acueducto, Alcantarillado y Aseo de Bogotá (EAAB).
En los juzgados de Paloquemao, un juez condenó a seis años y seis meses de prisión a Paola Solarte, hija del empresario constructor Carlos Solarte (dueño de la firma CASS Constructores). La mujer, quien tendrá casa por cárcel, fue hallada responsable por las irregularidades que se dieron en la celebración del contrato Tunjuelo- Canoas, obra que tenía como fin descontaminar del Río Bogotá.
El juez del caso avaló el preacuerdo firmado por Solarte en el que reconoció su responsabilidad en los delitos de cohecho por dar u ofrecer, interés indebido en la celebración de contratos y abuso de confianza. Asimismo, le ordenó a Solarte el pago de una multa de 486 salarios mínimos legales vigentes y la inhabilidad para ejercer cargos públicos o contratar con el Estado por 88 meses.
Aunque Paola Solarte en la audiencia de imputación de cargos no aceptó los delitos de peculado por apropiación agravado, interés indebido en la celebración de contratos y cohecho por dar u ofrecer, en el preacuerdo con la Fiscalía sí lo hizo. Por esa aceptación, el ente investigador “degradó” el delito de peculado por apropiación por abuso de confianza y la jueza lo avaló.
“El reconocimiento de la responsabilidad por parte de la incriminada se ajustó a derecho sin que se avizore ninguna violación de garantías fundamentales, ni vicios de consentimiento, como tampoco que se esté concediendo algún beneficio”, precisó en su momento el juez.
Las investigaciones
En las investigaciones de la Fiscalía, en las que también se investiga a su papá, señalan que en 2009 los Solarte pagaron sobornos junto con la firma brasileña Odebrecht para quedarse con el contrato para la construcción del túnel interconector entre el río Tunjuelo, la planta de tratamiento de aguas residuales Canoas y el río Bogotá.
Según la Fiscalía, CASS Constructores y Odebrecht se asociaron en el Consorcio Canoas y pactaron pagar 8,75 % en coimas, de un contrato que estaba tasado en más de $243.717 millones. El dinero, explicó el ente investigador, habría ido a parar a los bolsillos de concejales, contratistas, funcionarios de la Empresa de Acueducto, Alcantarillado y Aseo de Bogotá (EAAB).