El director de la Policía, general Oscar Naranjo, señaló que a pesar de los resultados obtenidos en la lucha contra las Bandas Emergentes están insatisfechos con los hechos ocurridos en Córdoba, donde fueron asesinados dos universitarios.
"Reconociendo los esfuerzos no estamos satisfechos con lo que sucede allí, la situación de violencia tiene que ser neutralizada y en esta situación queremos llamar la atención para que el país no categorice a las víctimas de primera y segunda. Las muertes en Córdoba de humildes campesinos, de ganaderos, de empresarios y de líderes comunales y de los miembros de la fuerza pública merecen toda nuestra importancia", dijo Naranjo.
El alto oficial manifestó además que los únicos responsables de las muertes en Córdoba son los delincuentes, ya que las capturas de 7.400 integrantes de las Bacrim hablan del compromiso y lucha contra el narcotráfico de la Policía.
"Nuestras acciones no sólo se concentran en Córdoba, estamos atacando nuevas regiones del país, 17 departamentos en los que se ha registrado la reducción desde 2006 de 33 bandas criminales a sólo siete", puntualizó.
Naranjo señaló que la investigación que adelantan para determinar los responsables de las muertes de Margarita María Gómez, de 25 años, y Mateo Matamala, de 26 años, ambos estudiantes de geología de la Universidad de los Andes, avanza con prudencia "para que no haya ninguna posibilidad de señalamientos que hablan de nuestra ligereza o irresponsabilidad en nuestro trabajo".
"Estamos para cumplir la ley y someter con toda determinación a cualquier delincuente a la justicia (...) Se está trabajando con determinación para identificar a los autores determinantes de este lamentable hecho", concluyó.