Prohibir el uso de las redes sociales en el juicio que se adelanta contra Carlos Cárdenas por la muerte de Luis Andrés Colmenares, fue la radical decisión que tomó en la mañana de ayer el juez encargado del caso. A consideración de la autoridad judicial, cuando se transmiten los detalles de la diligencia por medios como Twitter se termina vulnerando el debido proceso y las garantías de los testigos. Para el funcionario el objetivo de la determinación es lograr que “la prueba no sea contaminada con elementos que hayan sido ventilados en esta audiencia”, pues los futuros testigos tendrían un referente sobre lo que se ha dicho, hecho que podría inducir sus declaraciones. Por lo tanto, lo que pretende el juez es que “el testigo narre lo que sus sentidos percibieron” y que su relato no sea alterado por condiciones externas, como los procesos adelantados en las audiencias previas.
Esta decisión se produce después de la denuncia presentada por Martha Lucía Zamora, fiscal cuarta delegada ante la Corte Suprema, en la que manifiesta que los detalles de las diligencias judiciales y los testimonios del caso habían sido transmitidos vía Twitter en tiempo real. Según Zamora, esta amplia difusión del juicio fue realizada por una persona que pertenece a la oficina de prensa del abogado Jaime Granados, defensor de Laura Moreno. Además agregó que sus intervenciones y preguntas fueron tildadas de “estúpidas” e “irrelevantes” por los trinos que se suscitaron. La fiscal también expresó su preocupación frente a la situación, pues se afecta el desarrollo normal de la diligencia judicial y las declaraciones de los testigos que se pueden ver alteradas. De acuerdo con Zamora, habría perjucio en conocer la verdad.
Para Jaime Granados las aseveraciones de Zamora no son ciertas y buscan desviar la atención de lo fundamental en el caso. El abogado asegura que esto demuestra una distorsión en donde es atacado y señalado, pues pareciera que la fiscal está en su contra. “Mi equipo de prensa se compone de una sola persona y yo no lo oculto. Aquellos que transmitieron el juicio por la red social no son empleados míos”, dijo categóricamente. Tampoco celebró la decisión prohibitiva del juez pues observa que esa determinación se traduce en una censura que carece de marco legal. Es decir, para el abogado esa determinación no tiene una fundamentación jurídica. Por ahora, el juicio avanza y se esperan las declaraciones de más testigos que puedan ayudar a dilucidar si Carlos Cárdenas tuvo o no participación en los hechos confusos que rodearon la muerte de Luis Andrés Colmenares.