Apuntando a trabajar en las medidas de reparación que exige la Ley de Víctimas, el Ministerio de Justicia se encuentra preparando una recomendación al Comité Ejecutivo para la Atención y Reparación a Víctimas, para que se impongan dos medidas sobre las personas que dejaron las armas en la década de los 90: que pidan perdón en actos públicos y que participen en campañas incitando a otros a desmovilizarse.
Así lo dio a conocer esa cartera, indicando que ya se depuró una lista con los nombres de 10.530 exintegrantes del EPL, las Farc, el M-19, la Corriente de Renovación Socialista, el ELN, el Ejército Revolucionario Popular, el Ejército Revolucionario Guevarista, el Frente Francisco Garnica, MIR-COAR, el Partido Revolucionario de los Trabajadores, el Quintín Lame y las Milicias de Medellín (denominación para tres grupos de milicianos urbanos que delinquían independientemente en las comunas de Medellín: Milicias Populares del Pueblo y para el Pueblo, Milicias Independientes del Valle de Aburrá y Milicias Metropolitanas de la Ciudad de Medellín).
De acuerdo con el Ministerio, “estos desmovilizados no podrán negarse a realizar las acciones de reparación simbólica que les imponga el Comité Ejecutivo pues se trata de dar cumplimiento a un mandato legal”.
El Ministerio advirtió también que, según la Ley de Víctimas, los desmovilizados pueden acercarse voluntariamente al Comité Ejecutivo para la Atención y Reparación a Víctimas para proponer medidas de reparación simbólica, pero, hasta el momento, “no se ha acercado ninguno”.
De los 10.530 desmovilizados que el Gobierno contabilizó entre 1989 y 1997, la mayoría pertenecen al Ejército Popular de Liberación (EPL): 3.790, es decir, el 36%. Les siguen en la lista los 2.154 miembros de las Farc que dejaron las armas (20,4%); 1.211 del M-19 (11,5%); y 1.041 de la Corriente de Renovación Socialista (9,8%).