A la Sala de Instrucción de la Corte Suprema llegó una recusación en contra del magistrado Francisco Javier Farfán, quien es el togado encargado de investigar penalmente en el escándalo de los carrotanques de La Guajira y la presunta entrega de millonarios sobornos a congresistas por parte de altos funcionarios de la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo, entre ellos Sneyder Pinilla y Olmedo López.
El documento pide que el magistrado Farfán sea retirado del caso porque actualmente está siendo investigado por la Comisión de Investigación y Acusación de la Cámara de Representantes, cuyo presidente es el representante Wadith Alberto Manzur, a quién Olmedo López, exdirector de la UNGRD mencionó como parte de la trama corrupta. Sin embargo, el congresista conservador señaló que no conoce a la antigua cabeza de la entidad.
El Espectador conoció que, antes de que llegara la recusación, Farfán ya se había declarado impedido. Se espera que en los próximos días, los magistrados de la Sala de Instrucción de la Corte Suprema estudien el impedimento presentado por su compañero.
La investigación contra Farfán
Según el expediente que reposa en la Comisión de Acusación de la Cámara de Representantes, el magistrado habría filtrado información al clan Gnecco, sobre las averiguaciones que adelantaba el alto tribunal en contra de uno de sus integrantes: el senador del Partido de la U José Alfredo Gnecco Zuleta.
En octubre de 2023, un informe de Noticias Caracol expuso que, en mayo de 2019, desde el despacho del magistrado Farfán se habría filtrado información sobre el proceso que adelantaba el togado en contra del senador Gnecco Zuleta por presunta compra de votos para las elecciones legislativas de 2018.
En ese momento se señaló a Farfán como el responsable de las filtraciones que llegaron a Cielo Gnecco, lideresa del poderoso clan político de Cesar, a la cual se le escuchó advertirle en una llamada con Gnecco Zuleta -interceptada por la Fiscalía- que su teléfono estaba intervenido por orden de la Corte. La imagen del magistrado y del alto tribunal fueron puestas en duda, lo que llevó a Farfán a pedir que lo investigaran y a dar un paso al costado de sus funciones.
Además de la gravedad de que se filtrara información del alto tribunal, algo que influyo dentro del escándalo es el pasado judicial del clan Gnecco, cuyos integrantes han sido condenados o tienen deudas con la justicia. A mediados de febrero de este año, por ejemplo, Luis Alberto Monsalvo Gnecco, hijo de Cielo Gnecco, fue condenado por la Corte Suprema por corrupción el Plan de Alimentación Escolar en el Cesar, cuando era gobernador de ese departamento.
Además, su madre fue investigada por los delitos de secuestro extorsivo, homicidio y concierto para delinquir agravado. También, Armando de Jesús Gnecco Vega, sobrino de Cielo, es investigado por concierto para delinquir y homicidio, por, supuestamente, ser el autor intelectual del asesinato de Efraín Ovalle, un líder político de Cesar, en 2012.
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