:format(jpeg)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/elespectador/CJOREA7KEFAELOUOS6IIVJG3N4.jpg)
Marina Isabel Ferrer en foto familiar guardada por su hija.
Foto: Cortesía
Este viernes, la familia de Marina Isabel Ferrer recibirá, en una ceremonia, un pie calcinado que la Fiscalía pudo identificar como sus únicos restos. Ferrer fue a visitar en el Palacio de Justicia a una amiga el 6 de noviembre de 1985, cuando la guerrilla del M-19 irrumpió con fusiles a tomarse el edificio y luego el Ejército lo retomó a sangre y fuego. Hace 36 años, a los Ferrer les entregaron un cuerpo que, apenas en 2015, se supo que no era realmente de su madre, sino de una de las víctimas de desaparición forzada: Cristina Guarín. La hija de Marina Isabel, Sofía Velázquez Ferrer, habló con El Espectador de cómo ve esta entrega, que no es, de ninguna manera, un cierre.
Jhoan Sebastian Cote
Comunicador social con énfasis en periodismo y producción radiofónica de la Pontificia Universidad Javeriana. Formación como periodista judicial, con habilidades en cultura, deportes e historia. Creador de pódcast, periodismo narrativo y actualidad noticiosa.@SebasCote95jcote@elespectador.com