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Wílmer Ayola, quien desde el pasado miércoles es considerado como el testigo clave en el caso por la muerte de Luis Andrés Colmenares, identificará en los próximos días mediante la revisión de fotografías a las otras personas que habrían estado presentes en la golpiza que le causó la muerte al joven de 20 años en hechos registrados el 31 de octubre de 2010 en el parque El Virrey en el norte de Bogotá.
Según fuentes de la Fiscalía, dicha diligencia se realizará en un lugar secreto, puesto que el hombre se encuentra en el programa de protección a testigos, debido a que en los últimos meses recibió una serie de amenazas “con las que buscaban silenciarlo”.
Ante esto, el ente investigador negó que se hayan expedido tres órdenes de captura contra otras personas que presuntamente habrían participado en el lugar de los hechos, en los que supuestamente cuatro hombres y una mujer (supuestamente Laura Moreno) golpearon en repetidas oportunidades a Luis Andrés Colmenares, quien en estado de indefensión recibió un botellazo por parte de un hombre a quien llamaron ‘Carlitos’.
El pasado miércoles, la Fiscalía le imputó los delitos de homicidio doloso agravado en calidad de coautor y soborno en calidad de determinador a Carlos Cárdenas, cargos que le valieron para que un juez de garantías lo cobijara con medida de aseguramiento en un centro de reclusión.
El testigo clave
El pasado martes, Wilmer Ayola fue en compañía del fiscal 11 de la Unidad de Vida, Antonio Luis González al parque El Virrey en el norte de Bogotá con el fin de explicar los hechos que presenció en la madrugada del 31 de octubre de 2010.
En esa diligencia, el ahora considerado testigo clave, realizó una descripción detallada señalando en qué punto se encontraba él con su amigo Cristian (ahora desaparecido) y el punto en el que estaba los cinco jóvenes golpeando a Luis Andrés Colmenares.
En esos momentos, Ayola señaló que desde el punto en el que se encontraba pudo ver con claridad como el joven estudiante de la Universidad de los Andes era atacado a puntapiés y luego, nitidamente, cómo recibió un botellazo por una persona que se encontraba en la camioneta.
Y es que la declaración de este hombre, quien según fuentes de la Fiscalía tiene el grado de soldado profesional y ha trabajado en varias compañías de vigilancia, ha sido clave en el desarrollo de este proceso por el cual ya están siendo investigadas cuatro mujeres, entre las que se encuentran las jovenes Laura Moreno y Jessy Quintero, así como Aidé Acevedo y María del Pilar Gómez, made de Carlos Cárdenas.
Según el ente investigador, el testigo oriundo del municipio de Agustín Codazzi recibió amenazas de muerte el sábado, hecho por el cual se escondió en su casa y renunció a su trabajo como vendedor ambulante. Sin embargo, pese a estar invadido por el miedo el domingo decidió ir a la Sijín y presentar su declaración sin embargo cuando los agentes se dieron cuenta que se trataba del caso Colmenares lo llevaron a las instalaciones de la Policía Metropolitana.
Por El Espectador
