Testimonio de ex director del DAS compromete a Arango Bacci
Dijo que la huella que aparece en el recibo que certificaría la entrega de un dinero de la mafia no fue trasplantada.
El Espectador
El ex director del Departamento Administrativo de Seguridad, Andrés Peñate, dijo que la huella que certifica que Arango Bacci habría recibido 115 mil dólares, supuestamente provenientes del narcotraficante conocido con el mote del "El señor de la herradura", no fue trasplantada, ni se evidencia en ella nada irregular.
"No era una huella trasplantada, según lo que me dijeron los dos peritos del DAS que analizaron el documento", dijo Peñate al ser interrogado sobre la autenticidad del texto.
Sus declaraciones contrastan con lo expuesto por el ex uniformado que asegura que aunque esa identificación sí le corresponde, ésta había sido impresa en ese recibo, de manera ilegítima.
El testimonio de la directora Nacional del Cuerpo Técnico de Investigación de la Fiscalía, Marlú Méndez, respaldó la tesis del almirante, pues aseguró que los estudios reflejaban que la huella no había sido puesta directamente por el ex uniformado, controvirtiendo lo manifestado por Peñate, quien agregó que los resultados del análisis habían sido puestos en conocimiento del ministro de Defensa de la época, Juan Manuel Santos.
“Entra a trabajar el documentólogo, hace un estudio más profundo y encuentra que no es original, ni es auténtica la huella que aparece en el recibo”, dijo la funcionaria, confirmando los resultados de los estudios efectuado por el organismo el 19 de octubre de 2007.
Las declaraciones se produjeron este martes en la Sala de Audiencias de la Corte Suprema de Justicia, donde fueron citados a declarar los funcionarios, cuyos testimonios son diametralmente opuestos y dejan el interrogante entorno a la responsabilidad del ex oficial en el tráfico de narcóticos, que supuestamente, se efectuaba con la complicidad de hombres de la Armada Nacional.
Los testimonios fueron dados a conocer en el juicio que enfrenta el almirante, Gabriel Arango Bacci, quien es procesado por los delitos de concierto para delinquir agravado, revelación de secreto, cohecho propio y prevaricato por omisión.
El ex director del Departamento Administrativo de Seguridad, Andrés Peñate, dijo que la huella que certifica que Arango Bacci habría recibido 115 mil dólares, supuestamente provenientes del narcotraficante conocido con el mote del "El señor de la herradura", no fue trasplantada, ni se evidencia en ella nada irregular.
"No era una huella trasplantada, según lo que me dijeron los dos peritos del DAS que analizaron el documento", dijo Peñate al ser interrogado sobre la autenticidad del texto.
Sus declaraciones contrastan con lo expuesto por el ex uniformado que asegura que aunque esa identificación sí le corresponde, ésta había sido impresa en ese recibo, de manera ilegítima.
El testimonio de la directora Nacional del Cuerpo Técnico de Investigación de la Fiscalía, Marlú Méndez, respaldó la tesis del almirante, pues aseguró que los estudios reflejaban que la huella no había sido puesta directamente por el ex uniformado, controvirtiendo lo manifestado por Peñate, quien agregó que los resultados del análisis habían sido puestos en conocimiento del ministro de Defensa de la época, Juan Manuel Santos.
“Entra a trabajar el documentólogo, hace un estudio más profundo y encuentra que no es original, ni es auténtica la huella que aparece en el recibo”, dijo la funcionaria, confirmando los resultados de los estudios efectuado por el organismo el 19 de octubre de 2007.
Las declaraciones se produjeron este martes en la Sala de Audiencias de la Corte Suprema de Justicia, donde fueron citados a declarar los funcionarios, cuyos testimonios son diametralmente opuestos y dejan el interrogante entorno a la responsabilidad del ex oficial en el tráfico de narcóticos, que supuestamente, se efectuaba con la complicidad de hombres de la Armada Nacional.
Los testimonios fueron dados a conocer en el juicio que enfrenta el almirante, Gabriel Arango Bacci, quien es procesado por los delitos de concierto para delinquir agravado, revelación de secreto, cohecho propio y prevaricato por omisión.