La Agencia Nacional de Tierras (ANT) anunció el resultado de la ejecución de sus más recientes facultades de autoridad administrativa para dirigir operativos policiales en Santander, específicamente en el municipio de Cimitarra. Con ayuda de miembros de la Policía y Ejército Nacional, se realizaron varios operativos para recuperar cinco bienes baldíos, propiedad de la Nación, que eran ocupados por ganaderos y personas cercanas a exparamilitares.
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“Junto con la fuerza pública recuperamos más de 1.500 hectáreas en el Magdalena Medio. Corresponden a los predios Borinqueña, El Cumaral, Chimichagua y Alcaraván, que estuvieron en manos de los exparamilitares alias ‘Ruso’ y alias ‘Tomate’, además de El Porvenir, predio baldío que fue ocupado por empresarios ganaderos”, aseguró el director de la ANT, Felipe Harman
Según la investigación, a pesar de que las tierras recuperadas están dentro del registro del Fondo para la Reparación de Víctimas, la mayoría habían sido ocupadas hace más de 20 años por personas cercanas a actores armados. Las demás, habían sido ocupadas ilegítimamente por ganaderos que estaban aprovechándose de ellas, a pesar de que estaban destinadas para las víctimas del conflicto armado.
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La ANT agregó que gran parte de estas tierras, las cuales fueron despojadas durante el desarrollo del conflicto armado, fueron utilizadas para financiar grupos al margen de la ley, así como para lavar dinero del narcotráfico. Ahora, tras la recuperación, serán entregadas a campesinos para la siembra de alimentos y para la subsistencia de víctimas de la guerra.
“En una segunda jornada, programada para este miércoles, 14 de mayo, la máxima autoridad de tierras de la nación, también en operativos conjuntos con la fuerza pública, tiene como meta recuperar más baldíos en territorio santandereano, para sumar más de 2.000 hectáreas en los dos días de operativos”, concluyó la ANT en un comunicado de prensa.
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Algunas de las tierras en cuestión pertenecieron a Geiber José Fuentes Montaño, alias El Ruso, quien fuera financiero del frente Mártires del Cesar, del bloque norte de las Autodefensas Unidas de Colombia. En 2011, fue condenado por el asesinato de Miguel Ángel Lúquez, en una vivienda del corregimiento de Río Seco, en Valledupar.
Asimismo, sobre alias El Ruso pesa una condena 40 años de prisión por la masacre de cinco integrantes del grupo Mamo, del Cabildo Indígena de la comunidad Kankumama en Valledupar. El criminal fue uno de los paramilitares que irrumpió en el corregimiento de Atánquez, el 8 de diciembre de 2002, reteniendo a la fuerza a varios indígenas y asesinando a Alfredo Antonio Borrego y José Manuel Cáceres, así como Franklin Manuel Arias Arias, su esposa y sus dos hijos.
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