Persiste la consternación en el municipio de Tibú (Norte de Santander), tras conocerse sobre las 8:30 de la noche del pasado 15 de enero la noticia de una masacre en la que murieron tres integrantes de una misma familia, incluido un bebé de nueve meses de nacido.
Las víctimas fueron identificadas como Miguel Ángel López, Zulay Durán Pacheco y Miguel Herney López Durán, hijo de la pareja. La familia se movilizaba en un vehículo en la vía que de Tibú conduce a Cúcuta, cuando fueron atacados a tiros por hombres armados.
Inicialmente se habló de la muerte de todos los ocupantes del vehículo, pero esta mañana el alcalde de Tibú, Richar Claro, aseguró a medios de comunicación que Miguel Ángel López era padre de tres hijos, uno de ellos, de diez años de edad, iba en la parte trasera del carro y salió ileso del hecho.
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“La información que tenemos es que en la parte de atrás iba el hijo de diez años, no sabemos si estaba el otro todavía. Se salvó del ataque, logró salir del vehículo y en este momento se encuentra con los familiares”, dijo el alcalde.
En el momento del ataque, el menor acudió a vecinos del sector que lo protegieron y dieron anuncio sobre la masacre. Acerca del tercer hijo de la familia no se tiene información.
“Él solo tenía ese vehículo y no estaba trabajando en ese momento; por eso creería yo que tenía cuestiones personales por las cuales se desplazaba con su familia en el vehículo laboral”, dijo el alcalde sobre la razón por la cual la familia se movilizaba en un vehículo de la Funeraria San Miguel, de la cual eran propietarios.
Miguel Ángel López era conocido entre la comunidad de Tibú, por ser la única que persona que acudía al levantamiento de cadáveres en el municipio, sin tener conflictos con los grupos armados de la región. Incluso, recientemente se había publicado un documental en el que se exaltaba su trabajo.
“En Tibú hay una particularidad y es que las autoridades competentes, en este caso Medicina Legal, no tiene presencia en el municipio, el Cuerpo de Investigación (CTI) tampoco puede hacer levantamientos de estos hechos violentos y Miguel, con su funeraria, se había convertido en la persona que iba a cualquier lugar del municipio o del Catatumbo a hacer los levantamientos en muertes violentas”, narró el alcalde Claro.
Según la información inicial, las tres personas se movilizaban en un coche fúnebre de la Funeraria San Miguel, cuando hombres armados atacaron de frente el vehículo y asesinaron a los tres ocupantes que iban en la parte delantera.
De inmediato las autoridades se trasladaron al lugar para hacer el levantamiento de los cuerpos e iniciar con la investigación correspondiente. Esto pese a las dificultades de acceso por la presencia de grupos armados como el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y el Clan del Golfo.
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El alcalde aseguró que no se tiene conocimiento sobre posibles amenazas a la familia, que den pistas sobre los móviles del triple homicidio. Por eso, hizo un llamado a las autoridades para que investiguen las razones detrás del hecho, que permitan esclarecerlo.
Luego de conocerse la noticia, el presidente Gustavo Petro se pronunció a través de su cuenta de X. Calificó la noticia como lamentable y aseguró que las autoridades avanzan en la investigación. “Unidades de Policía se encuentran adelantando actividades de recolección de información y verificación, para establecer los móviles y autores del hecho”, escribió el mandatario.
Esta es la segunda masacre de 2025, la primera ocurrió el pasado 12 de enero en el Bulevar de Oriente, en Cali (Valle del Cauca), donde tres personas fueron asesinadas. La última masacre de 2024, ocurrida en Aguachica (Cesar), también cobró la vida de tres personas de una misma familia y fue la número 76 de ese año.
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