Luego de 22 años de búsqueda, una madre del Caquetá puedo encontrar y dar sepultura digna a los restos de su hija, quien murió en 2002, en el marco de acciones del conflicto armado. La joven, quien había sido reclutada por las FARC y desaparecida cuando recién cumplió 15 años, se encontraba enterrada en el cementerio comunitario de La Unión Peneya, corregimiento del municipio de La Montañita (Caquetá). A partir de una muestra de ADN que la madre proporcionó en 2021, la Unidad de Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas (UBPD) halló el parentesco con los restos.
Esta es la primera identificación de una niña víctima de reclutamiento de las FARC, y es la séptima entrega digna y culturalmente pertinente de cuerpos asociados a las recuperaciones del cementerio comunitario de La Unión Peneya, realizada por la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) y la UBPD. La investigación humanitaria en este cementerio comunitario registra un total de 2.169 personas dadas por desaparecidas. “Durante la entrega digna, la familia y los demás seres queridos acompañaron el momento con recuerdos y anécdotas sobre la hija de Marta. El cuerpo siempre estuvo rodeado por arreglos de rosas. ´'Yo era pequeña, pero ella siempre nos cuidaba. Tenía un librito que nos leía’, recordó una de las hermanas”, así lo relató la UBPD.
También, de acuerdo con la Unidad, la familia tuvo apoyo psicosocial para recibir el cuerpo y escuchar de parte de un experto forense del Instituto Nacional de Medicina Legal los hallazgos relacionados con la muerte de su hija y hermana. La niña murió en medio de un enfrentamiento con la fuerza pública, ocurrido menos de un mes después de haber sido reclutada. Lugo de una ceremonia y un espacio íntimo entre la familia y su ser encontrado, todos se dirigieron al cementerio el cual la madre había elegido para enterrar, tras una larga espera, dignamente a su hija. Debido a que no existía un retrato de la joven, la JEP dispuso un artista para que la dibujara de acuerdo a la descripción de su madre: cabello largo y de color negro, con las cejas pobladas.
Es muy doloroso, pero a la vez hay un alivio de que ella va poder descansar en paz
Madre de la joven encontrada en el cementerio comunitario de La Unión Peneya (Caquetá).
La investigación relacionada con este y otros casos de La Unión Peneya se enmarca dentro del Plan Regional de Búsqueda de Caquetá Centro de la UBPD. Hasta la fecha, las 2.169 personas dadas por desaparecidas que abarcan este plan en La Unión, son la mitad de los 4.590 que componen el total del universo de desaparecidos en el Caquetá. El caso de La Unión Peneya inició en 2021 a partir del informe ‘Bajo tierra piden justicia’ que la organización Red ADN remitió tanto a la Unidad de Búsqueda como a la JEP. El informe hacía referencia a sitios en el cementerio comunitario en los que estarían los cuerpos de varias personas desaparecidas en medio del conflicto armado.
El informe ‘Bajo tierra piden justicia’ permitió que la JEP impusiera medidas cautelares para proteger estos cuerpos, varios de los cuales estarían asociadas al caso 07, que investiga casos de reclutamiento y utilización de niñas y niños en el conflicto armado colombiano. Con esta entrega, la UBPD obedece al cumplimiento de la orden judicial de la Jurisdicción en el que se insta a la Unidad a realizar acciones de pedagogía y de relacionamiento con los familiares buscadores e impulsar la identificación de los 47 cuerpos recuperados hasta lograr la totalidad de las entregas dignas. Hasta ahora, ocho han sido entregados dignamente a sus familias, y de estos, cinco fueron personas reclutadas por las Farc-siendo menores de edad.
Para conocer más sobre justicia, seguridad y derechos humanos, visite la sección Judicial de El Espectador.