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Después de que el director de la Fundación Forjando Futuros, Gerardo Vega, denunciara el asesinato de un reclamante de tierras de una de las fincas, que según él, hoy son propiedad de Jorge Pretelt y su familia. La Unidad de Restitución aclaró que la solicitud del reclamante no tinía relación con predios del magistrado Pretel.
Según explicó la Unidad de Restitución de Tierras (URT) es la madre de Avilés Guerra quien figura oficialmente como reclamante de tierras del lugar denominado ‘No Hay Como Dios’. Aclara la institución que éste no corresponde a los predios que hacen parte del escándalo por el presunto despojo de tierras del que se habrían beneficiado el magistrado Jorge Pretelt y su esposa, la procuradora judicial Martha Ligia Patrón López. Así mismo, aclara la entidad, se trata de un terreno con el mismo nombre que no es propiedad del magistrado.
“El señor Octavio Avilés no era reclamante de tierra, la que es reclamante de tierra es su madre, está reclamando un predio en Turbo, a mediados de mayo la unidad fue a la zona, miró el predio y Avilés nos ayudó en la labor de medición del predio, ese es el trabajo que hemos estado haciendo en la zona”, explicó a Blu Radio Ricardo Sabogal, director de la entidad.
En la misma vía el magistrado Pretelt señaló por medio de su cuenta de Twitter que sospechaba que estas acusaciones tenían de fondo “una concertación de fuerzas oscuras. Nada tiene que ver el señor Avilez asesinado en Ayapel, Córdoba, con mis predios”. Así mismo añadió que si bien el Gobierno no protege a su familia, le pedía que “al menos proteja a Reinaldo Villalba, quien sí es reclamante de No Hay Como Dios”. Igualmente calificó como infame a León Valencia, actualmente Director de la Fundación Paz y Reconciliación, quien también ha indicado que Avilés Guerra era reclamante de sus predios. “Infame @LeonVaLenciaA dar información falsa. Para difamación contra mi familia”, indicó el magistrado en su cuenta de Twitter.
Ante esto, Gerardo Vega ha indicado que “Octavio Avilès, asesinado ayer, sí es reclamante de tierras. Que la URT no lo reconozca es su desconocimiento de la realidad”, de la misma forma indicó que “las tierras de Octavio y Teresa Guerra se ubican en la hacienda ‘La 35’ donde operaba y entrenaba paramilitares Carlos Castaño y que al lado de ‘La 35’ está la finca ‘La Corona’, propiedad de los Prefelt, y el corregimiento ‘El Tomate’ donde fue asesinado Carlos Castaño”.
En medio del vaivén de acusaciones el presidente Juan Manuel Santos se pronunció y señaló que ya ha dado la orden a la Policía Nacional “de dar con los responsables del homicidio al reclamante de tierras en Córdoba a la mayor brevedad”.