Dos nuevos ataques en contra de la fuerza pública ocurrieron en la tarde de este martes en el departamento de Antioquia, específicamente en los municipios de Ebéjico y Vegachí. El reporte hasta el momento es de tres uniformados heridos, que de inmediato fueron trasladados a centros médicos para recibir atención.
Según informaron fuentes de la Policía Nacional a este diario, el ataque en Ebéjico ocurrió específicamente en el sector La Sucia, del corregimiento de Sevilla. Una patrulla de la Policía se movilizaba por la vía hacia el municipio de Santa Fe de Antioquia cuando fue impactada por una carga explosiva.
En el vehículo, adscrito a la estación de Policía de Sevilla, se transportaban el subcomandante y un patrullero. Al parecer, viajaban a recoger a otro uniformado. La camioneta quedó destruida y los policías fueron auxiliados por la comunidad del sector. Luego los trasladaron de urgencia a la ciudad de Medellín.
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Sobre el hecho ocurrido en Vegachí, hasta ahora se sabe que unidades de Policía adelantaban un patrullaje por el parque principal de la población, cuando hombres armados, que se movilizaban en una motocicleta, les dispararon indiscriminadamente. Uno de los uniformados fue herido en su hombro; lo atendieron en el hospital local.
Escalada violenta
Este hecho se suma a la lista de ataques en contra de la fuerza pública que se han presentado durante las últimas semanas en el país. Varios de ellos en el departamento de Antioquia, que han dejado un saldo total de seis policías muertos. Cinco de ellos fueron víctimas de ataques sicariales por parte de hombres armados
De los casos de la última semana, el primero ocurrió el martes 15 de abril, en el municipio de Carepa (Antioquia), donde el subintendente Deimer Díaz Pérez murió baleado por hombres armados y en medio de hechos que aún son materia de investigación.
Según se conoce hasta el momento, el uniformado, que hacía parte del Grupo de Acción Unificada por la Libertad Personal (Gaula) estaba a las afueras de un establecimiento comercial, cuando fue abordado por hombres en una motocicleta, quienes le propinaron varios disparos. El homicidio ocurrió en el día de descanso de Díaz Pérez, por lo que estaría indefenso y sin arma de dotación.
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Al día siguiente, en la vereda El Concilio, zona rural del municipio de Salgar, también en Antioquia, una carga explosiva se activó; el hecho causó la muerte del subintendente Nelson Humberto Cárdenas Carmona. Otros tres uniformados resultaron heridos por la detonación. Cárdenas Carmona, de 34 años, llevaba 15 años al servicio de la institución.
Después, en la noche del 19 de abril, el patrullero Jorge Luis García Meza, quien era miembro de la seccional de Investigación Criminal, fue abordado por hombres armados en el municipio de Chigorodó, en el mismo departamento. Según la información que se conoce hasta el momento, el uniformado, que llevaba 14 años en la institución, corrió a resguardarse en una vivienda de la urbanización Villas de Guatapurí. Sin embargo, hasta allí llegaron los sujetos y lo asesinaron.
Sobre las 8:15 de noche del mismo sábado santo, pero en el municipio de Lourdes (Norte de Santander), hubo otro asesinato de un uniformado. Hombres armados le dispararon al patrullero Andrés David Padilla Mejía, quien adelantaba labores de acompañamiento y seguridad durante una de las procesiones de la Semana Santa. Sin mediar palabra, los sujetos que se movilizaban en una motocicleta atacaron al uniformado de 28 años y huyeron.
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Padilla Mejía, oriundo del municipio de Cotorra (Córdoba), quedó gravemente herido y fue trasladado de inmediato a un centro asistencial cercano, donde horas después se confirmó su deceso. Así lo señaló el general Carlos Fernando Triana, comandante de la Policía Nacional, por medio de una publicación en su cuenta de X.
El último hecho ocurrió sobre las 6:30 de la tarde del domingo de pascua, 20 de abril, en zona rural de la ciudad de Cartagena. Según la información de las autoridades, los sujetos abrieron fuego indiscriminadamente contra un puesto de control de la Policía Nacional. En el hecho murieron dos uniformados y un civil.
Según se conoce, los uniformados estaban en un puesto de control instalado en el sector de La 15, en el corregimiento de Pasacaballos. Hasta allí llegaron los hombres en motocicletas y atacaron a las personas que estaban en el lugar. El patrullero Andrés Felipe Carrillo Bayona, de 21 años, murió en el sitio de los hechos, igual que un civil identificado como Rufino Giraldo.
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El subintendente Jhon Jairo Evangelista Monterroza quedó gravemente herido. De inmediato fue trasladado a un centro asistencial cercano para estabilizarlo y de allí lo remitieron a un centro médico de mayor complejidad en la ciudad de Cartagena. Sin embargo, por la gravedad de sus heridas, un par de horas después se confirmó su deceso.
El director de la Policía se ha pronunciado públicamente sobre este posible plan pistola en contra de la fuerza pública. Demostró su rechazo a los crímenes en contra de policías y anunció recompensas de hasta $100 millones por información que permita dar con los responsables detrás de cada uno de los homicidios.
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