Llegó el día cero del primer capítulo del proceso judicial contra el expresidente Álvaro Uribe Vélez por supuesta manipulación de testigos. El lunes 28 de julio, Sandra Liliana Heredia Aranda, jueza 44 penal de Bogotá, dará a conocer su decisión sobre si el exmandatario y líder del Centro Democrático es culpable o no de los delitos de soborno, soborno en actuación penal y fraude procesal.
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Para entender qué va a pasar, El Espectador le trae una guía con los temas claves del caso que ha pasado por la Corte Suprema de Justicia, llevó al arresto de Uribe, dividió a dos fiscales generales, y que tuvo casi 100 testigos entre paramilitares, políticos y empresarios.
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¿Qué pasará en la audiencia?
A las ocho y media de la mañana de este lunes, en el complejo judicial de Paloquemao en Bogotá, se darán cita el expresidente Álvaro Uribe Vélez, el senador Iván Cepeda Castro, los abogados de cada uno, así como las demás víctimas, la Fiscalía, la Procuraduría y la jueza.
Después de las presentaciones y el protocolo de cualquier audiencia, la jueza Sandra Liliana Heredia Aranda empezará a leer el sentido del fallo de este expediente judicial que arrancó en 2018, cuando la Corte Suprema de Justicia le notificó al exjefe de Estado y al país que tenía evidencia de que habría manipulado la versión de varios testigos que lo vincularon con grupos paramilitares, para salir beneficiado en otras investigaciones.
Todavía no es claro cuánto tiempo leerá la jueza y en qué momento exacto se sabrá el futuro judicial de Uribe. No obstante, las decisiones que puede tomar Heredia Aranda están más claras. Por un lado, puede declararlo inocente, al considerar que la Fiscalía y las víctimas no lograron probar la participación del expresidente en ninguno de los delitos por los que fue acusado.
Para que este sea el camino, la jueza tendrá que argumentar por qué considera que no existió ningún acto criminal por parte de Uribe en los seis hechos que logró concretar el ente investigador en el escrito de acusación que presentó en abril de 2024. La Fiscalía sostiene que fue el determinador de los tres delitos. La defensa señala que nunca supo de nada ilegal.
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Otra decisión que puede tomar la jueza Heredia es declarar culpable a Uribe. Si este es el caso, la jueza tendrá que explicar que el expresidente sí fue el determinador del esquema de manipulación de testigos por el que fue llevado a juicio y uno de sus abogados, Diego Cadena, también se encuentra en una situación judicial muy similar.
Lo que explicó la Fiscalía es que este último, en representación de Uribe, habría ofrecido dádivas a cambio de que testigos hablaran positivamente de su cliente. De nuevo, la jueza tendrá que explicar hecho por hecho y, si en uno solo considera que el expresidente sí participó en hechos criminales (así sea un solo delito), basta con ese para declararlo culpable.
Y el último camino es el de la absolución por duda. Si esta es la decisión de la jueza Heredia, significa que para esta instancia judicial no existieron suficientes pruebas para declarar la culpabilidad o inocencia del procesado. Cuando esto pasa en el sistema judicial, la balanza se inclina a favor del investigado y queda absuelto, no porque sea inocente, sino porque no hubo evidencia para resolver su participación en hechos criminales.
Cualquiera que sea la decisión, Uribe, la Fiscalía y las víctimas pueden apelar. ¿Qué sucede entonces? Que el expediente pasa al Tribunal Superior de Bogotá, en donde la Sala Penal tendrá que volver a revisar el proceso y tomar una decisión.
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Como el caso prescribe en octubre de este año, el Tribunal estaría a contra reloj para revisarlo. No obstante, cuando este tipo de situaciones suceden y la prescripción se asoma con afán, los magistrados pueden darle prioridad al expediente y resolverlo antes del tiempo que normalmente se tardan en una circunstancia como esta.
En todo caso, ese tampoco sería el final del proceso, pues las partes todavía pueden acudir a la Corte Suprema de Justicia, ya sea con un recurso de casación o de doble conformidad. Solo cuando el expediente llegue hasta ese alto tribunal, no habrá un punto de cierre en esta historia judicial. Y, aunque las reglas no lo estipulan, Uribe, Cepeda y las demás víctimas, tendrán la tutela.
¿Uribe puede ir a la cárcel?
La respuesta definitiva a esta pregunta realmente solo puede darla la justicia. Sin embargo, y por su importancia, ya existen pistas. Por un lado, lo más probable es que este lunes la jueza Heredia no dé a conocer esta decisión, como tampoco el monto de la pena, si lo llega a declarar culpable, pues normalmente esa es una determinación que los jueces comunican en otra audiencia.
De todas maneras, también se sabe que la defensa de Uribe tiene recursos que le permitirían al procesado no ir a la cárcel, por ejemplo, que la medida privativa de la libertad sea en prisión domiciliaria. En este caso, el expresidente tiene votos a su favor, pues ha comparecido en todo el proceso y estuvo en casi todas las audiencias de su juicio.
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Uno de sus abogados, Jaime Granados, explicó que, en caso de que el expresidente sea declarado culpable este lunes, le solicitará a la jueza Heredia una medida de prisión domiciliaria mientras se apela el fallo. Esta estrategia la dio a conocer el jurista en entrevista a la revista Semana.
“Por las circunstancias propias del caso, los límites punitivos, la concurrencia de factores de atenuación y agravación, ciertamente estamos hablando de un escenario, en donde además, por la naturaleza misma de los delitos, admiten la prisión domiciliaria”, dijo Granados.
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En todo caso, la realidad de este escenario solo se conocerá luego de que la jueza lea su decisión y dé a conocer el monto de la pena que, según el Código Penal, puede ser de entre seis y 12 años. Con las partes del proceso y el país expectante a la decisión de hoy, los reflectores están puestos sobre la jueza que tomará la decisión en primera instancia, en medio de las controversias políticas que han seguido todo el proceso, desde 2018, pero que ahora toman otro tono de cara a las elecciones de 2026.
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