"Yo no era amigo de la 'Casa Castaño'": López Cabrales

El procurador delegado pidió la semana pasada sentencia condenatoria en contra de López Cabrales, por el nombramiento de un Secretario de salud, que presuntamente llegó a ese cargo por un pacto entre el extraditado Salvatore Mancuso y los candidatos a la gobernación de Córdoba a principios de este siglo, para que el ex jefe 'para' se alejara de las elecciones.

Como consecuencia de ello, el senador ha mostrado varias pruebas que buscan demostrar, contrario a lo que indicó el fiscal, que él si denunció ante diferentes instancias que estaba siendo hostigado por los paramilitares en Córdoba.

"Por qué se olvida que acudí a tres fiscales, dos consejeros para la paz, un Presidente de la República - Andrés Pastrana-, pero nada se logró.  A las autoridades policías y militares no podía acudir porque era como acudir a él", refiriéndose a Salvatore Mancuso, que no negó la infiltración en estas instancias, en el departamento de Córdoba.

De igual manera López Cabrales negó haber conocido al cuñado de Mancuso, "nada tuve que ver en ese nombramiento", indicó, al tiempo que ratificó que ese Secretario de Salud fue nombrado en el cargo por sus méritos.

Con respecto a su presunta cercanía con la 'Casa Castaño', indicó que a Carlos lo conoció cuando estaba secuestrado por las autodefensas, que "luego de once días de estar en ese lugar, se presentan en un helicóptero que decía 'Helicol', y sobre una falda en una montaña, un señor que le decían alias 'el Compadre' y el señor Carlos Castaño", que le diría posteriormente que él era su pieza clave por su importancia política.

Las AUC en la academia

Salvatore Mancuso, la semana pasada en la audiencia del congresista López, indicó que las AUC se tomaron la dirección de la Universidad de Córdoba y la CVS, porque eran entidades corruptas, que necesitaban una reforma.

El congresista negó que las AUC se hubieran tomado el poder de ambas instituciones por las razones indicadas por Mancuso, pues en su momento, alias 'El Principiante' le dijo a Manuel Figueroa,  que si no votaba por Víctor Hugo Hernández “se muere”, porque "la universidad hay que quitársela a Juan Manuel López, porque hay que quitarle el poder político". Asegura que de igual manera todos los miembros del Consejo Directivo de la Universidad fueron hostigados para elegir a ese nuevo director.

Mostró de igual manera gráficas que revelan el crecimiento económico y de estudiantes en la universidad desde 1990 hasta el 2000, cuando fue tomada por las AUC. A su parecer ese crecimiento, que implicó también más ingresos, fue lo que hizo ver como "buen negocio" tomarse el poder de esa institución, y no acabar con la supuesta corrupción que se vivía adentro.