Esta semana se difundió un video en redes sociales en que dos niños, de cuatro y cinco años, eran amarrados, golpeados y quemados por su madre y su padrastro en Santa Rosa de Cabal, Risaralda. Los hechos, aunque realmente sucedieron a finales de enero de este año, son un nuevo episodio en que los menores de edad son violentados dentro de sus propios hogares.
(En contexto: ¿Qué pasó con el caso de maltrato a los niños de 4 y 5 años en Risaralda?)
El Espectador habló con expertos e instituciones para conocer cómo debe denunciarse este tipo de violencias en cualquier parte del país. Las denuncias, como explicó Aldeas Infantiles, son fundamentales, pues el 85 % de las violencias que sufren los niños en Colombia se dan en “entornos domésticos”; mientras la impunidad, ya sea por silencio o demoras en la atención estatal, deja el 97 % de los casos sin justicia.
¿Qué denunciar?
Actualmente hay al menos 44 leyes, resoluciones o decretos ejecutivos que velan por la seguridad física y respeto por los derechos fundamentales de los menores. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), se entiende como violencia contra menores de edad “cualquier forma de abuso o desatención que afecte a un menor de 18 años: abarca todo tipo de maltrato físico, afectivo, abuso sexual, desatención, negligencia y explotación comercial (...) que pueda poner en peligro la supervivencia de una relación de confianza, responsabilidad y poder”.
Es decir que desde maltratos físicos, como el que sucedió en Santa Rosa de Cabal, hasta violencia psicológica o utilizar menores con fines comerciales (limosna, turismo sexual) son castigados por la ley colombiana.
(Vea: Los esfuerzos de Colombia para eliminar la violencia contra la niñez)
Esteban Reyes, director de Aldeas Infantiles, explicó a El Espectador que “la prevención de estas violencias es clave, porque muchas veces las familias no saben cuándo están desprotegiendo a sus propios hijos. Un ejemplo es cuando las mamás sacuden a los bebés para regañarlos y que dejen de llorar: eso causa afectaciones permanentes en el cerebro que son irreversibles”.
Pero para el director de la oenegé, que lleva más de 50 años velando por los derechos de los niños, hace énfasis en que hay otros contextos de violencia o maltrato que están “normalizados”, como por ejemplo, aproximaciones sexuales inapropiadas o golpear a los menores con el fin de corregirlos (que también está prohibido y castigado por la ley 2089 de 2021).
¿Cómo denunciar?
El Ministerio de Justicia ha creado una hoja de ruta para que, en los diferentes escenarios de violencia, sea más fácil denunciar y acudir a las autoridades para obtener respuesta. Según esa cartera, cuando se trata de agresiones físicas, emocionales, sexuales o económicas, se debe acudir a un despacho de la Fiscalía llamado Centro de Atención e Investigación Integral contra la Violencia Intrafamiliar (CAVIF) y contactarlos a través de estos medios:
-Teléfono: 685 45 66 Ext. 72401 – 72402
Pero hay más entidades que trabajan articuladamente para atender las denuncias de maltrato infantil. La Policía Nacional, a través de los Centros de Atención Inmediata (CAI) cercano, está obligada a orientarlo y notificar a una oficina de la institución llamada Policía de Infancia y Adolescencia.
Sin embargo, en algunos municipios muy apartados, no es fácil el acceso a la institucionalidad. Para eso, el Estado ha diseñado tres maneras de denunciar y acudir a escenarios donde se agredan menores:
- La línea 141: número que puede marcar directamente desde teléfonos fijos y celulares.
- La línea gratuita nacional ICBF: 018000 91 80 80. Disponible de lunes a domingo las 24 horas.
- PBX: +57(1) 4377630. Disponible de lunes a viernes de 8:00 a.m. a 5:00 p.m.
Las denuncias sobre maltrato infantil también se pueden hacer a través de teprotejo.org. Cabe mencionar que, según explica el Ministerio de Justicia, cualquier ciudadano que conozca o presencia un caso de violencia contra los menores puede presentar la denuncia.
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