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Luego de pasar varios meses bajo rehabilitación, un cusumbo (Nasua nasua) que había sido mantenido ilegalmente como mascota en el municipio de Saladoblanco, Huila, fue liberado en su hábitat natural. El animal regresó a la libertad en compañía de otro ejemplar de su misma especie, dentro de una reserva natural ubicada al sur del departamento, donde podrá retomar su rol ecológico en un entorno boscoso y conservado.
El caso se remonta a febrero, cuando la comunidad alertó a las autoridades ambientales sobre la presencia del cusumbo en una vivienda. En un operativo conjunto entre la Corporación Autónoma Regional del Alto Magdalena (CAM) y la Policía Ambiental, el animal fue decomisado. Además de estar en cautiverio, era exhibido en redes sociales y utilizado como atractivo turístico, en clara violación de la normativa ambiental colombiana.
“Damos por terminado el proceso de rehabilitación de estos individuos, realizando una liberación sumamente exitosa con dos animales que fueron devueltos a su medio natural”, señaló Luisa Jaramillo, bióloga de la CAM.
La especialista explicó que ambos cusumbos continuarán su adaptación en el entorno silvestre, donde podrán cumplir funciones clave para la salud del ecosistema, como oxigenar los suelos y controlar plagas mediante el consumo de insectos y especies rastreras.
Durante los cuatro meses de recuperación en el Centro de Atención y Valoración de Fauna Silvestre de la CAM, el cusumbo rescatado fue sometido a diversos tratamientos. Presentaba parásitos externos, dermatitis alérgica causada por pulgas y un pelaje deteriorado debido al contacto con fauna doméstica. También se evidenció que era alimentado con comida salada, lo que alteraba su dieta natural basada en invertebrados.
El animal fue puesto en cuarentena, y luego, ante la presencia de comportamientos estereotipados derivados del cautiverio, como caminar de un lado a otro de forma repetitiva, fue integrado con otros individuos de su especie. Esta interacción fue clave para reforzar sus comportamientos naturales y preparar su regreso a la vida silvestre.
La CAM aprovechó la ocasión para recordar a la ciudadanía que la fauna silvestre no debe mantenerse como mascota. En caso de encontrar animales en peligro o en cautiverio, es fundamental reportar la situación a las autoridades competentes. “Todos los individuos son importantes y hacen parte de los eslabones que necesitamos para que nuestra flora y fauna siga persistiendo”, concluyó Jaramillo.
El regreso del cusumbo a su hogar natural es una muestra de que, con el compromiso de las autoridades y la ciudadanía, es posible reparar los daños del cautiverio y devolverle a la fauna su derecho a vivir en libertad.
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