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Cheky fue adoptado con amor y devuelto sin explicación: esto causó indignación

El felino no es agresivo ni problemático, solo necesita tiempo. Su carácter tímido ya había sido explicado desde el principio.

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La Red Zoocial
19 de abril de 2025 - 03:38 p. m.
Cheky no es un gato agresivo ni problemático. Es tímido, sí, y necesita tiempo.
Cheky no es un gato agresivo ni problemático. Es tímido, sí, y necesita tiempo.
Foto: Huellas Felinas
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Hace apenas unas semanas, Cheky parecía haber encontrado por fin un poco de paz. Este gato de mirada dulce y comportamiento reservado había vivido toda su vida en la calle, hasta que fue rescatado y se le ofreció una oportunidad real de conocer lo que significa un hogar. Su historia se difundió en redes sociales y no tardó en aparecer una familia interesada en adoptarlo.

Sin embargo, la ilusión duró muy poco. A las 48 horas de estar en su nuevo hogar, la familia comunicó que ya no lo quería. No hubo una razón clara ni justificación suficiente. Lo único cierto es que Cheky fue devuelto.

Para quienes lo conocen y lo han cuidado desde su rescate, el golpe ha sido devastador. “Nos lo devuelven sin más. Y ahora solo tenemos una jaula para él”, lamentan desde la organización que lo tiene a su cargo. “Después de haber sentido por primera vez lo que es un hogar, no queremos que vuelva a otro horror de vida”.

Cheky no es un gato agresivo ni problemático. Es tímido, sí, y necesita tiempo. Su carácter reservado hace que su proceso de adaptación sea más lento que el de otros animales, algo que fue explicado desde el primer momento a la familia que lo adoptó. También se hizo énfasis en que, si hay niños en casa, deben respetar su espacio, ya que este tipo de animales pueden agobiarse fácilmente. Para un animal que apenas ha comenzado a experimentar una vida digna, esto supone un retroceso muy duro.

Una historia que refleja una realidad común

Aunque esta historia ocurre en España, no es un caso aislado ni exclusivo de un país. Cada día, en distintas partes del mundo, animales son adoptados impulsivamente y devueltos en cuestión de días. Esto revela una falta de comprensión sobre lo que realmente implica el acto de adoptar.

Cheky no necesitaba caricias inmediatas ni juegos desde el primer momento. Solo necesitaba tiempo. Necesitaba que lo entendieran. Y eso, en muchas ocasiones, es lo más difícil de ofrecer. Adoptar no es solo querer tener un animal en casa, sino estar dispuesto a acompañarlo en su proceso, respetar sus tiempos y aceptar sus miedos.

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