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Varios amantes de gatos suelen estar familiarizados con los pequeños cabezazos que reciben de sus animales. Muchos pueden considerar que esto es adorable, pero, ¿qué significa este gesto?
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Los gatos poseen glándulas en sus mejillas, frente y barbilla, que contienen feromonas, una sustancia que los animales usan para comunicarse a través del olfato. De hecho, uno de los sentidos más importantes para los animales suele ser el olfato, porque este suele desarrollarse primero que la vista, por lo que desde que nacen se guían por los aromas a su alrededor para comprender el mundo.
Como explica el portal PetMD, cuando los gatos dan un cabezazo, están transfiriendo estas feromonas a la piel de la persona. Estas feromonas provienen de glándulas ubicadas justo delante de las orejas de los gatos. Si bien las personas no pueden detectar estas feromonas, ellas pueden representar para un gato el territorio que ha marcado, por lo que comunican a otros gatos que ellos han estado allí.
De hecho, los gatos suelen tener diferentes formas de dar cabezazos. Algunos gatos podrán chocar su cabeza directamente con la de su dueño, por lo que puede sorprender a las personas. En otras ocasiones, el cabezazo es un contacto mucho más suave.
El portal PetMD también diferencia los cabezazos de otros comportamientos, como, por ejemplo, cuando los gatos comienzan a empujar su cabeza contra la pared o una esquina y generalmente no muestran signos de relajación.
Este comportamiento puede venir acompañado de cambios en la visión, autolesiones, o una presión excesiva en la cabeza. Si algún felino comienza a presionar su cabeza o presenta cualquier otro síntoma, podría tener algún problema de salud mental o afección neurológica que debe ser examinada por un veterinario.
Entre los principales significados de los cabezazos, se encuentran la alegría, felicidad y comodidad que los felinos están sintiendo en este momento. Algunos gatos incluso pueden comenzar a revolcarse juguetonamente, ronronear, tener sus ojos entreabiertos o mostrar otros comportamientos relajantes.
Un felino que no conoce a una persona puede cabecearla para olerla o para familiarizarse con ella. También, este gesto puede servir como una forma para establecer lazos sociales, pues, al cabecear entre sí, los gatos pueden mezclar sus olores para crear un aroma único. Este olor particular puede distribuirse entre todos los gatos de la colonia.
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Del mismo modo, este gesto puede ser una estrategia que tienen los animales para llamar la atención, recibir caricias o alimentación. Los gatos suelen emplear cabezazos para conectar con personas familiares, convirtiendo este gesto en una manera de elegir a alguien. Por ello, debe tomarse como un elogio y no como un ataque por parte de estos animales, pues es una definitiva señal de afecto.
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