El secretario de Estado de EE.UU., John Kerry, aseguró hoy no se debe "perder la esperanza en la solución de dos Estados" para resolver el conflicto entre Israel y los palestinos porque "no hay otra". "No debemos perder la esperanza en la solución de los dos Estados, porque no hay otra alternativa viable", dijo Kerry en una comparecencia en el Departamento de Estado, en la que justificó la decisión de su país de no vetar el pasado viernes la resolución de la ONU que exigió a Israel el fin a su política de asentamientos en territorios palestinos.
El responsable de la diplomacia estadounidense, que ha dedicado enormes esfuerzos por lograr un acuerdo entre israelíes y palestinos, aseguró que su Gobierno tomó la decisión de abstenerse en la votación de esa resolución con la finalidad de preservar el principio de los dos Estados, que se encuentra en "grave peligro". Kerry criticó al actual Gobierno de coalición del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, que ha respondido duramente a la decisión de EE.UU. de no votar la resolución, y se preguntó cómo se puede alcanzar la paz "si las partes ni siquiera han mostrado la voluntad de reunirse".
En respuesta, Netanyahu consideró que el discurso de Kerry fue "sesgado" y "obsesivo" con las colonias judías en territorio ocupado. "Tal y como lo fue la resolución en el Consejo de Seguridad que Kerry promovió, su discurso ha sido sesgado contra Israel", afirmó Netanyahu en un comunicado difundido por su oficina minutos después de finalizar la intervención televisada de Kerry. "Durante cerca de una hora, ha hablado de forma obsesiva sobre los asentamientos y apenas ha tocado las raíces del conflicto: la oposición palestina a un Estado judío cualesquiera que sean sus fronteras", agregó. Netanyahu dijo, además, que Israel ha formulado numerosas tentativas de diálogos que han sido rechazadas por la Autoridad Nacional Palestina.
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"La paz sólo se puede lograr con contactos directos", insistió a su vez Kerry en lo que parecen ser sus últimos esfuerzos para que palestinos e israelíes se sienten en la mesa de negociaciones antes de que abandone su cargo, el 20 de enero, fecha en que el presidente Barack Obama entregará la Presidencia al republicano Donald Trump. "No podemos imponer la paz", insistió.
Por su parte, el ministro israelí de Energía, Yuval Steinitz, calificó hoy de "no realista" el discurso del jefe de la diplomacia estadounidense saliente, en el que éste expuso la visión de Obama para resolver el conflicto palestino-israelí. "Nuestra reacción es de indignación, y con justicia. Nos han herido de forma deshonesta (con la resolución), con fantasías, pero debemos actuar con la cabeza y no con las entrañas", afirmó en una breve entrevista con el canal público de la televisión al terminar el discurso. Steinitz también exhortó al Gobierno israelí a actuar "con sangre fría para no beneficiar a los que quieren perjudicar" a su país, en una aparente crítica a la larga serie de represalias diplomáticas que Israel ha impuesto a los catorce Estados que votaron a favor de la resolución de la ONU, entre ellos España, Francia, el Reino Unido y Venezuela.