Keiko Fujimori: "El presidente Kuczynski debe renunciar"

Keiko Fujimori, lideresa de Fuerza Popular, principal partido opositor en Perú, exhortó al presidente Pedro Pablo Kuczynski a renunciar antes de que el Congreso debata un nuevo pedido de destitución por casos de presunta corrupción con la empresa brasileña Odebrecht.

"Ante esta situación tan compleja en la que hay serios cuestionamientos de corrupción contra el presidente de la República, creo que debe dar un paso al costado", dijo Keiko Fujimori durante una entrevista al programa de televisión 'Beto a Saber', difundida la noche del martes por la cadena ATV.   

"Yo creo que Pedro Pablo Kuczynski debería renunciar", reiteró Keiko Fujimori antes de finalizar la entrevista de una hora.  

Fujimori estimó que una renuncia de Kuczynski le permitiría al vicepresidente Martín Vizcarra asumir en su reemplazo la presidencia y completar el período de gobierno restante hasta julio de 2021, cuando culmina su mandato de cinco años. 

Una renuncia, según Keiko Fujimori, "aliviaría esta situación de debatir una nueva moción de vacancia (destitución). Creo que el señor Vizcarra, que además ha manifestado que no renunciaría ante la posibilidad de una vacancia, le podría dar un mayor impulso a nuestro país", agregó Fujimori.

La lideresa de Fuerza Popular, un partido populista de derecha que detenta la primera minoría en el Congreso, estimó que este miércoles su partido anunciará si apoya el nuevo pedido de vacancia que impulsan dos partidos de la minoritaria izquierda parlamentaria.

El pedido de vacancia podría ser presentado este mismo miércoles para ser debatido dentro de una o dos semanas. 

La hija mayor del expresidente Alberto Fujimori, a quien Kuczynski indultó la Navidad pasada, señaló que su partido "no fomenta nuevas elecciones" y defendió una eventual gestión de Vizcarra.

Fue la primera entrevista de Keiko Fujimori en 20 meses. Desde que perdió las elecciones contra Kuczynski, la dirigente sólo se comunicaba con la prensa a través de las redes sociales.

Sus declaraciones se producen una semana después de que el exrepresentante de Odebrecht en Perú, Jorge Barata, revelara ante fiscales peruanos en Sao Paulo que la empresa brasileña aportó 1,2 millones de dólares a su campaña en 2011. Keiko Fujimori lo niega.

Kuczynski ya se salvó de ser destituido el pasado 22 de diciembre cuando un pedido de vacancia respaldado por Fuerza Popular no alcanzó los votos suficientes para destituirlo. 

En esa ocasión fue clave el apoyo a Kuczynski de Kenji Fujimori, hermano menor de Keiko, quien logró que 10 legisladores de Fuerza Popular votaran contra la destitución. Ese grupo se alejó del partido de Keiko y le arrebató la mayoría parlamentaria que tenía hasta entonces.

En se contexto el mandatario otorgó un polémico indulto humanitario al expresidente Alberto Fujimori, quien cumplía condena de 25 años por delitos de lesa humanidad.   

El nuevo pedido de destitución contra Kuczynski, de 79 años, suma nuevas denuncias de su presunta relación con Odebrecht, como el haber recibido 300.000 dólares para su campaña de 2011, lo que el presidente ha rechazado.

Keiko Fujimori, lideresa de Fuerza Popular, principal partido opositor en Perú, exhortó al presidente Pedro Pablo Kuczynski a renunciar antes de que el Congreso debata un nuevo pedido de destitución por casos de presunta corrupción con la empresa brasileña Odebrecht.

"Ante esta situación tan compleja en la que hay serios cuestionamientos de corrupción contra el presidente de la República, creo que debe dar un paso al costado", dijo Keiko Fujimori durante una entrevista al programa de televisión 'Beto a Saber', difundida la noche del martes por la cadena ATV.   

"Yo creo que Pedro Pablo Kuczynski debería renunciar", reiteró Keiko Fujimori antes de finalizar la entrevista de una hora.  

Fujimori estimó que una renuncia de Kuczynski le permitiría al vicepresidente Martín Vizcarra asumir en su reemplazo la presidencia y completar el período de gobierno restante hasta julio de 2021, cuando culmina su mandato de cinco años. 

Una renuncia, según Keiko Fujimori, "aliviaría esta situación de debatir una nueva moción de vacancia (destitución). Creo que el señor Vizcarra, que además ha manifestado que no renunciaría ante la posibilidad de una vacancia, le podría dar un mayor impulso a nuestro país", agregó Fujimori.

La lideresa de Fuerza Popular, un partido populista de derecha que detenta la primera minoría en el Congreso, estimó que este miércoles su partido anunciará si apoya el nuevo pedido de vacancia que impulsan dos partidos de la minoritaria izquierda parlamentaria.

El pedido de vacancia podría ser presentado este mismo miércoles para ser debatido dentro de una o dos semanas. 

La hija mayor del expresidente Alberto Fujimori, a quien Kuczynski indultó la Navidad pasada, señaló que su partido "no fomenta nuevas elecciones" y defendió una eventual gestión de Vizcarra.

Fue la primera entrevista de Keiko Fujimori en 20 meses. Desde que perdió las elecciones contra Kuczynski, la dirigente sólo se comunicaba con la prensa a través de las redes sociales.

Sus declaraciones se producen una semana después de que el exrepresentante de Odebrecht en Perú, Jorge Barata, revelara ante fiscales peruanos en Sao Paulo que la empresa brasileña aportó 1,2 millones de dólares a su campaña en 2011. Keiko Fujimori lo niega.

Kuczynski ya se salvó de ser destituido el pasado 22 de diciembre cuando un pedido de vacancia respaldado por Fuerza Popular no alcanzó los votos suficientes para destituirlo. 

En esa ocasión fue clave el apoyo a Kuczynski de Kenji Fujimori, hermano menor de Keiko, quien logró que 10 legisladores de Fuerza Popular votaran contra la destitución. Ese grupo se alejó del partido de Keiko y le arrebató la mayoría parlamentaria que tenía hasta entonces.

En se contexto el mandatario otorgó un polémico indulto humanitario al expresidente Alberto Fujimori, quien cumplía condena de 25 años por delitos de lesa humanidad.   

El nuevo pedido de destitución contra Kuczynski, de 79 años, suma nuevas denuncias de su presunta relación con Odebrecht, como el haber recibido 300.000 dólares para su campaña de 2011, lo que el presidente ha rechazado.