La estrategia legal de Maduro contra la amnistía para opositores venezolanos
El mandatario toma la medida el mismo día que partidarios de la oposición y el chavismo se enfrentaron este jueves en la capital venezolana.
AFP
El presidente venezolano, Nicolás Maduro, pidió este jueves a la justicia que declare inconstitucional una amnistía aprobada por la mayoría opositora en el Parlamento para liberar a sus dirigentes presos.
Ante miles de seguidores que se manifestaron frente al palacio presidencial de Miraflores contra la amnistía, Maduro firmó un documento que dio inicio al trámite para "pedir a la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) que declare inconstitucional la ley de amnistía criminal".
Maduro justificó su pedido a la Sala Constitucional señalando que la amnistía aprobada el 29 de marzo es "una ley de guerra, para el odio", y "un autoperdón de los golpistas donde confiesan sus crímenes durante 17 años" de gobierno chavista.
Con esa norma, la oposición busca liberar al menos a 76 de sus dirigentes presos, y que cesen los procesos judiciales contra cientos de "perseguidos y exiliados políticos".
"Si esta ley se aprobara, Venezuela entraría en un ciclo de guerra civil, no lo podemos permitir. En Venezuela no va a reinar la división ni el odio, para que haya paz debe haber justicia", afirmó el presidente, quien dijo encontrarse dentro de los plazos legales para acudir al Poder Judicial.
La Sala Constitucional es una poderosa instancia del TSJ, al que la oposición acusa de estar al servicio del oficialismo tras recientes fallos que eliminaron facultades de control del Parlamento, quedando fuera de su competencia los poderes Judicial, Electoral y los militares.
Al mismo tiempo, Maduro anunció la creación de una "comisión por la verdad, la justicia y la reparación de las víctimas", que tratará los casos de los opositores presos, y que según él cuenta con el respaldo del secretario general de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), Ernesto Samper.
En la movilización contra la amnistía participaron familiares de personas muertas o heridas, especialmente durante protestas para presionar la renuncia de Maduro que tuvieron lugar entre febrero y mayo de 2014.
Esas manifestaciones se saldaron con 43 muertos y unos 800 heridos, y motivaron la condena a casi 14 años de cárcel contra el líder radical Leopoldo López, acusado de incitar a la violencia cuando las convocó, y quien sería uno de los beneficiados con la ley de amnistía.
Ofensiva contra el Parlamento
La oposición se ha propuesto sacar a Maduro del poder mediante un referendo revocatorio o una enmienda constitucional que reduzca su mandato de seis a cuatro años, junto con movilizaciones populares que exijan la renuncia del presidente.
En su discurso transmitido por cadena de radio y televisión, el mandatario socialista también anunció que evaluará una propuesta de reducir el período del actual Parlamento, si éste insiste en aprobar una enmienda constitucional para acortar su gobierno (2013-2019).
"La voy a evaluar con absoluta seriedad, le prometo al país, y si veo la posibilidad de despejar los caminos del golpismo y de la utilización de la Asamblea Nacional, yo mismo la activaría si el pueblo me acompaña. Se los prometo y me comprometo", expresó.
En medio de cánticos de "justicia y esta Asamblea va a caer", el gobernante acogió para estudio una propuesta del constitucionalista Hermann Escarrá, quien intervino en el acto de este jueves, para referirse a la proyectada enmienda.
"El artículo único de esa enmienda debe decir: se reduce a 60 días el período constitucional de los integrantes de la actual Asamblea Nacional", dijo Escarrá.
Las enmiendas, según la Constitución, deben ser sometidas a referendo.
Mientras Maduro anunciaba su cruzada contra la amnistía, la oposición parlamentaria tenía previsto aprobar este jueves una ley que flexibiliza la convocatoria al referendo revocatorio.
También alista una reforma que apunta a que la oposición tenga presencia en la Sala Constitucional aumentando el número de magistrados, lo que promete atizar la guerra de poderes que estremece a Venezuela desde que la oposición asumió el control del Congreso.
Poco antes de la marcha contra la amnistía, partidarios de la oposición y el chavismo se enfrentaron a golpes y pedradas, cuando un grupo de diputados opositores acudía al Consejo Nacional Electoral (CNE) -en el centro capitalino- para exigirle que active el revocatorio contra Maduro.
El presidente venezolano, Nicolás Maduro, pidió este jueves a la justicia que declare inconstitucional una amnistía aprobada por la mayoría opositora en el Parlamento para liberar a sus dirigentes presos.
Ante miles de seguidores que se manifestaron frente al palacio presidencial de Miraflores contra la amnistía, Maduro firmó un documento que dio inicio al trámite para "pedir a la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) que declare inconstitucional la ley de amnistía criminal".
Maduro justificó su pedido a la Sala Constitucional señalando que la amnistía aprobada el 29 de marzo es "una ley de guerra, para el odio", y "un autoperdón de los golpistas donde confiesan sus crímenes durante 17 años" de gobierno chavista.
Con esa norma, la oposición busca liberar al menos a 76 de sus dirigentes presos, y que cesen los procesos judiciales contra cientos de "perseguidos y exiliados políticos".
"Si esta ley se aprobara, Venezuela entraría en un ciclo de guerra civil, no lo podemos permitir. En Venezuela no va a reinar la división ni el odio, para que haya paz debe haber justicia", afirmó el presidente, quien dijo encontrarse dentro de los plazos legales para acudir al Poder Judicial.
La Sala Constitucional es una poderosa instancia del TSJ, al que la oposición acusa de estar al servicio del oficialismo tras recientes fallos que eliminaron facultades de control del Parlamento, quedando fuera de su competencia los poderes Judicial, Electoral y los militares.
Al mismo tiempo, Maduro anunció la creación de una "comisión por la verdad, la justicia y la reparación de las víctimas", que tratará los casos de los opositores presos, y que según él cuenta con el respaldo del secretario general de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), Ernesto Samper.
En la movilización contra la amnistía participaron familiares de personas muertas o heridas, especialmente durante protestas para presionar la renuncia de Maduro que tuvieron lugar entre febrero y mayo de 2014.
Esas manifestaciones se saldaron con 43 muertos y unos 800 heridos, y motivaron la condena a casi 14 años de cárcel contra el líder radical Leopoldo López, acusado de incitar a la violencia cuando las convocó, y quien sería uno de los beneficiados con la ley de amnistía.
Ofensiva contra el Parlamento
La oposición se ha propuesto sacar a Maduro del poder mediante un referendo revocatorio o una enmienda constitucional que reduzca su mandato de seis a cuatro años, junto con movilizaciones populares que exijan la renuncia del presidente.
En su discurso transmitido por cadena de radio y televisión, el mandatario socialista también anunció que evaluará una propuesta de reducir el período del actual Parlamento, si éste insiste en aprobar una enmienda constitucional para acortar su gobierno (2013-2019).
"La voy a evaluar con absoluta seriedad, le prometo al país, y si veo la posibilidad de despejar los caminos del golpismo y de la utilización de la Asamblea Nacional, yo mismo la activaría si el pueblo me acompaña. Se los prometo y me comprometo", expresó.
En medio de cánticos de "justicia y esta Asamblea va a caer", el gobernante acogió para estudio una propuesta del constitucionalista Hermann Escarrá, quien intervino en el acto de este jueves, para referirse a la proyectada enmienda.
"El artículo único de esa enmienda debe decir: se reduce a 60 días el período constitucional de los integrantes de la actual Asamblea Nacional", dijo Escarrá.
Las enmiendas, según la Constitución, deben ser sometidas a referendo.
Mientras Maduro anunciaba su cruzada contra la amnistía, la oposición parlamentaria tenía previsto aprobar este jueves una ley que flexibiliza la convocatoria al referendo revocatorio.
También alista una reforma que apunta a que la oposición tenga presencia en la Sala Constitucional aumentando el número de magistrados, lo que promete atizar la guerra de poderes que estremece a Venezuela desde que la oposición asumió el control del Congreso.
Poco antes de la marcha contra la amnistía, partidarios de la oposición y el chavismo se enfrentaron a golpes y pedradas, cuando un grupo de diputados opositores acudía al Consejo Nacional Electoral (CNE) -en el centro capitalino- para exigirle que active el revocatorio contra Maduro.