Una Venezuela en crisis amanecerá este lunes con los nombres de sus nuevos diputados, que asumirán sus funciones a partir de enero. Hay mucha tensión. Las encuestas dicen que la oposición al chavismo puede lograr la mayoría en la Asamblea Nacional (AN) por primera vez desde 1998. A horas de celebrarse las elecciones, el gobernador del estado Miranda, líder de la oposición y dos veces excandidato presidencial, Henrique Capriles, le explicó a El Espectador el país que puede venir después del 6D.
¿Por qué no es candidato a diputado por la MUD?
Así empezó mi carrera política, fui diputado del extinto Congreso de la República, incluso fui el presidente más joven de la Cámara de Diputados. Hoy mi rol es otro, soy el gobernador de nuestro estado Miranda y desde allí trabajamos para devolverle la calidad de vida a nuestro pueblo.
Siendo gobernador de Miranda, ¿por qué realiza una gira proselitista por ciudades de otros estados de Venezuela?
Los venezolanos estamos llamados a poner todo nuestro empeño y esfuerzo para lograr el cambio y construir la Venezuela con la que soñamos.
Hubo acosos armados contra actividades de la MUD en semanas previas. Voceros del Gobierno hacen silencio o atribuyen esos episodios a un montaje, a la “derecha infiltrada”, ¿qué hay de cierto en esas acusaciones?
Es el disco rayado que todos conocemos, pero ya nadie les cree. Estos lamentables hechos ocurren porque son ellos los que tienen miedo al pueblo, porque saben que el pueblo quiere un cambio, lo pide a gritos, y ellos hacen oídos sordos.
Usted es gobernador, ¿confía en las instituciones policiales o judiciales en Venezuela?
Venezuela necesita un cambio y ese cambio pasa también por las instituciones, muchas de ellas son hoy un brazo ejecutor del Ejecutivo y eso hay que cambiarlo, las instituciones deben estar al servicio de nuestro pueblo, no del gobierno de turno. Una de las razones por las cuales hay tantos crímenes es la impunidad y combatirla pasa por cambiar el sistema de administración de justicia. Los poderes los elige la Asamblea Nacional, por eso es importante tener allí hombres y mujeres comprometidos con el país y no con intereses políticos.
¿Cree que la oposición será mayoría en la próxima AN?
Todas las encuestas así lo señalan. Por supuesto, el sentimiento de cambio está, quienes recorremos las comunidades lo sentimos, pero eso no se da solo, los candidatos tienen que hacer su trabajo y quienes tenemos una responsabilidad también debemos estar en la calle escuchando y hablando con nuestro pueblo, entre todos tenemos que organizarnos para convertir ese sentimiento en una gran fuerza electoral y, sin duda, unidos lo lograremos.
¿Confía en los representantes de la Unasur como observadores?
Este proceso electoral debe recibir a toda la comunidad internacional para que observen lo que suceda antes, durante y después del día de las elecciones.
Hubo violación de normas por parte de los dos grandes bloques políticos, en especial del partido de gobierno. Las autoridades dictaron medidas cautelares en algunos casos, pero los representantes de Unasur no se han pronunciado en ese sentido. ¿Cree usted que deberían hacerlo como acompañantes internacionales?
El ventajismo por parte del Gobierno lo hemos visto en todas las contiendas electorales. Los organismos internacionales son importantes, en su momento nosotros acudimos a ellos, pero está claro que somos los venezolanos los que vamos a resolver nuestros problemas y a lograr el cambio, a través de las vías que establece la Constitución.
Luego de perder por estrecho margen la presidencia de Venezuela con Maduro en 2013, usted exigió recontar los votos. ¿Puede el Consejo Nacional Electoral (CNE) manipular los resultados de una elección o eso es un mito?
La Venezuela de 2013 es diferente a la de hoy. En ese momento había dos mitades prácticamente iguales. Hoy la gran mayoría de nuestra Venezuela quiere un cambio. Si salimos a votar masivamente, por mucha artimaña que hagan, no podrán cambiar el resultado.
No respondió, ¿realmente puede el CNE manipular el resultado?
La brecha es muy grande, en todas las encuestas lo hemos visto. Es prácticamente imposible que el Gobierno gane esta elección si salimos a votar masivamente y nos quedamos cuidando los votos, como debe hacerse.
¿Qué va a pasar en la MUD si el chavismo vuelve a ser mayoría en la AN? ¿No piensa que existe un aire de triunfalismo delicado en la oposición?
Lo delicado es la situación económica y social que atraviesa el país. La escasez de alimentos y medicinas, alta inflación, empobrecimiento, criminalidad… eso es lo que ha alejado del dúo Nicolás-Cabello a los venezolanos que creyeron en Chávez. Nunca en la historia habíamos tenido una situación tan grave. Aquí no hay triunfalismo, hay una necesidad de cambio y de exigirle al Gobierno que rectifique su modelo, y la tarea fundamental de la AN es legislar en beneficio de todos y hacer una contraloría de los recursos de la Nación.
¿Cómo imagina diciembre y enero en Venezuela luego de estas elecciones?
Nadie quiere que haya una explosión en el país, ése es el juego del Gobierno y sería gravísimo. Estas elecciones no van a solucionar los problemas de la noche a la mañana, pero son el inicio para la reconstrucción del país.
En caso de conseguir la mayoría simple en la AN, ¿cuáles serían las primeras tres propuestas de leyes a ser aprobadas por parte de la MUD?
Quienes conformamos la Unidad trabajamos desde hace tiempo en un plan de progreso para Venezuela, pero no me corresponde a mí hablar de ello, sino a los candidatos a la AN.
Diecisiete años después de 1998, ¿cree que las voces más radicales de la oposición han entendido al chavismo y su importancia como fenómeno político y social?
Cada quien a su manera, pero seguro que todos hemos aprendido de lo que hemos vivido durante tantos años. Nuestro discurso nunca ha cambiado: hay que construir un país que incluya a todos, donde todos nos respetemos, no importa las ideas que tengamos. Aquí no puede haber atajos, hay una Constitución y ella nos permite hacer los cambios que hay que hacer, y la herramienta que tiene el pueblo para hacer esos cambios es el voto y lo va a demostrar hoy, para abrir las puertas al futuro.
Ha hablado de cambio de modelo, plan de progreso y también del futuro. ¿Los planes de la oposición en materia económica pasan por reformas neoliberales como el libre comercio, la reducción del gasto público, la privatización de empresas o la solicitud de asistencia al Fondo Monetario Internacional?
La agenda de la nueva AN no puede ser política, tiene que ser una agenda que haga que el Gobierno responda en materia económica. Venezuela elegirá legisladores, no al Poder Ejecutivo, pero desde el Poder Legislativo, que tiene una función contralora, se puede exigir, por ejemplo, la explicación de por qué desde hace once meses no se publican las estadísticas de la inflación, cuando somos el país con la mayor tasa de inflación del mundo. Los venezolanos no sabemos cuáles son las reservas del país ni cuál es la producción petrolera. La nueva AN debe exigirle al Gobierno que se sincere respecto al sistema cambiario, que ha sido el foco de mayor corrupción; y tiene que exigirle respuestas sobre en qué se va a gastar el dinero de los préstamos que han solicitado, cuánto debemos, si se lo van a gastar en aviones Sukhoi o van a asumir su responsabilidad y se va a invertir en materia prima para que nuestros productores puedan activar la producción. Si el Gobierno no responde, los venezolanos entenderemos que habrá que activar la agenda política.
En una eventual transición en el Poder Ejecutivo, ¿será de nuevo candidato presidencial?
Estas elecciones no son para escoger un presidente, estamos eligiendo a la AN. De lo otro se hablará cuando corresponda.
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Guía para entender las elecciones
Los venezolanos escogen hoy a los miembros de la Asamblea Nacional, el parlamento encargado de tramitar las leyes que se renueva cada cinco años. Serán 167 diputados elegidos que se posesionarán el 5 de enero de 2016. En la actualidad, existen 98 diputados del gobierno oficial, 65 de la oposición y dos independientes (en esta ocasión habrá dos escaños más a razón del aumento poblacional). Su sistema electoral combina elección nominal y por lista. La primera se realiza en 87 circunscripciones (municipios y parroquias, que escogen 113 escaños) y la segunda, en los 23 estados más el Distrito Capital (que define a 51 legisladores). Los restantes tres son elegidos por indígenas. La oposición domina en estados con más electores (52%), pero con menos escaños.
Elección nominal
En 87 circunscripciones se escogerán 113 escaños por nombre y apellido, repartidos a partir de cálculos demográficos del Instituto Nacional de Estadística. El vencedor será quien consiga la mayoría absoluta (50% más uno de los votos) en cada circunscripción.
19,5 millones de venezolanos están habilitados para votar este domingo.
14.515 centros de sufragio estarán activos en el país.
1.799 candidatos se presentan a estas votaciones: 671 mujeres y 1.128 hombres.
Por Leo Felipe Campos
