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“Nosotros no lo matamos”, dice colombiano en juicio por asesinato de Jovenel Moïse

Carlos Giovanni Guerrero Torres, uno de los exmilitares colombianos detenidos por el magnicidio del presidente de Haití, aseguró en la más reciente audiencia que no participó en el crimen y que fue enviado por una empresa estadounidense junto con la Policía haitiana.

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27 de mayo de 2025 - 09:54 p. m.
“Yo no sé quién mató al presidente. Nosotros no fuimos”, dijo Carlos Giovanni Guerrero, colombiano acusado de asesinato en Haití. ¿Qué paso?
“Yo no sé quién mató al presidente. Nosotros no fuimos”, dijo Carlos Giovanni Guerrero, colombiano acusado de asesinato en Haití. ¿Qué paso?
Foto: EFE/ Johnson Sabin
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Los exmilitares colombianos detenidos en Haití por su presunta participación en el asesinato del entonces presidente Jovenel Moïse, ocurrido en julio de 2021, comparecieron este 26 de mayo ante el tribunal en una nueva audiencia marcada por tensiones, gritos y declaraciones de inocencia por parte de los acusados.

Carlos Giovanni Guerrero Torres, exteniente coronel del Ejército colombiano, pudo hablar de su caso judicial tras casi cuatro años de prisión y negó haber participado en el asesinato. “Señor magistrado, quiero que se restablezcan mis derechos procesales. Llevo cuatro años donde todo el mundo me señala como culpable de algo que no hice”, dijo.

“Nosotros no lo matamos”

En su declaración, Guerrero sostuvo que fue contratado en 2021 por una empresa de seguridad de Estados Unidos y que el 7 de julio, día en que ocurrió el magnicidio, es decir, el asesinato violento de una figura política o persona con poder, recibió la orden de asistir a la Policía haitiana en una operación.

“Me dijeron: ‘Vaya con la Policía’, y fuimos con la Policía”, aseguró. Según su testimonio, no sabía que se dirigían a la casa del presidente y que, al llegar, permaneció con cerca de 20 hombres, entre ellos colombianos, en el patio de la residencia, sin ingresar al dormitorio.

Relató que, después de varias horas en el lugar, escuchó disparos provenientes de los agentes con los que había llegado. “Yo no sé quién mató al presidente. Nosotros no fuimos”, afirmó ante el tribunal, con la ayuda de una intérprete.

Guerrero indicó que fue en ese momento de confusión, cuando empezaron a recibir disparos de la misma Policía, que decidió refugiarse en la Embajada de Taiwán, donde más tarde fue capturado.

La audiencia fue suspendida luego de que uno de los magistrados sugiriera que el solo hecho de haber estado en el lugar lo comprometía con el crimen. La reanudación está prevista para el 28 de mayo.

Un juicio marcado por contradicciones

La defensa de los exmilitares colombianos, encabezada por la abogada Sondra Macollins, insistió, en diálogo con El Tiempo, que el caso ha sido manejado políticamente en vez de judicialmente y que el proceso está lleno de irregularidades.

En declaraciones anteriores, Macollins recordó que el juez del caso incluso ordenó la investigación al exdirector de la Policía Nacional de Haití, Léon Charles, y una orden de captura a la exprimera dama, Martine Moïse, esposa del fallecido presidente, quien inicialmente había sido la principal testigo contra los colombianos.

Martine Moïse, quien fue gravemente herida en el ataque, recibió disparos en los brazos y una pierna, fue acusada posteriormente de complicidad en el magnicidio con una orden de captura. Según la investigación del juez haitiano Walter Wesser Voltaire, sus declaraciones estaban plagadas de contradicciones.

¿Quién mató realmente a Moïse?

Cuatro años después, la pregunta sobre quién ordenó el asesinato sigue sin respuesta definitiva. El caso ha estado plagado de versiones cruzadas y una doble investigación sin cooperación entre Haití y Estados Unidos.

La versión entregada por el exmilitar colombiano Carlos Giovanni Guerrero, quien insiste en que no participó, contrasta con otras que han circulado desde 2021.

Una de las más reveladoras provino de una investigación de Noticias Caracol, difundida en 2022. La unidad investigativa accedió a más de 15 horas de grabaciones con las voces de cuatro exmilitares colombianos presuntamente involucrados en la operación: el capitán retirado Germán Rivera García (alias “Mike”), el subteniente Yeiner Carmona Flores, el sargento Ángel Yarce Sierra y el soldado Naiser Franco Castañeda. En los audios, sus presuntas voces relatan con detalle cómo ingresaron a la residencia presidencial y lo que ocurrió en la madrugada del 7 de julio de 2021.

Según esos testimonios, el plan inicial era ejecutar una supuesta orden de captura contra Moïse. Sin embargo, afirman que la instrucción cambió radicalmente ya estando en la residencia: “Toca matar a todo el mundo”, dice uno de los audios, presuntamente dicho por Rivera. También se habla del colombiano Víctor Pineda como quien habría disparado contra el mandatario. Moïse recibió 12 impactos de bala.

Uno de los nombres que aparece con frecuencia en las investigaciones es el del pastor haitiano-estadounidense Christian Emmanuel Sanon, dice France 24, a quien algunos sectores señalan como figura clave en una fase temprana del plan, cuando, según versiones, se contemplaba secuestrar al presidente, no asesinarlo.

Hasta ahora, más de 40 personas han sido detenidas en Haití, entre ellas 21 exmilitares colombianos y unos 20 funcionarios locales. La justicia haitiana también ha vinculado al actual primer ministro, Ariel Henry, luego de que se conocieran registros de llamadas entre él y uno de los acusados, hechas incluso horas después del magnicidio.

Una red de sospechas sin fin

Cinco jueces han pasado por el caso: algunos renunciaron bajo amenazas y otros fueron destituidos.

Según una investigación del New York Times, Moïse trabajaba en una lista de políticos y empresarios ligados al narcotráfico que pensaba entregar a EE. UU., mientras impulsaba un referendo constitucional que habría aumentado sus poderes como presidente.

Este testimonio de Carlos Giovanni Guerrero Torres solo añade una nueva capa al enredo judicial de este magnicidio geopolíticamente sensible.

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conrado urrego(xybxp)29 de mayo de 2025 - 02:01 p. m.
Como se dice por acá."de ese calentao,no como",qué hacían allá.
Usuario(82157)27 de mayo de 2025 - 10:42 p. m.
Fueron invitados a un piñata por eso todos armados hasta los dientes , son mercenarios en caso contrario qué hacen unos extranjeroa armados en la casa presidencial ? Capturar al presidente '? cómo así debian saber qué algo andaba mal y qué estabán del lado del lobo feroz no de caperucita , es decir del lado equivocado cómo en verdad ocurrio. ( Que se haga justicia si son culpables qué paguen y sino qué los liberen , pero las evidencias son jodidas).
  • Ximena(mdxl5)28 de mayo de 2025 - 07:22 p. m.
    De acuerdo
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