Opiniones de los primeros compradores de cannabis recreativo en el mundo

El amanecer de este jueves en Montevideo fue distinto. La tradicional tranquilidad en las calles contrastaba con la prisa de decenas de uruguayos que madrugaron a escribir una página en la historia del continente. Sin saberlo, se convirtieron en las primeras personas del mundo en adquirir marihuana estatal para uso recreativo, en cuatro de las 16 farmacias que se habilitaron para el comercio de la planta en todo el país. Lo histórico del día se cerró con un stock agotado en todos los locales de la capital uruguaya. (Lea: Al fin llega la marihuana a las farmacias uruguayas)

Monitor Cannabis, un equipo multidisciplinario que investiga sobre la regulación en Uruguay, calcula que hay unos 160.000 consumidores de marihuana en un país de 3,4 millones de habitantes. De ese total, al menos unas 60.000 personas la usan de forma habitual. El Gobierno fijó el precio de venta al público en aproximadamente 1,30 dólares el gramo, y limitó a 40 la cantidad de gramos que puede adquirir al mes un usuario. Se venderán dos variedades en empaques totalmente sellados: "Alfa I" (indica) y "Beta I" (sativa).

“Es gracioso: en dos horas vendimos apenas tres medicamentos, pero hubo 30 personas que llegaron para comprar marihuana", dijo a la agencia AFP la vendedora de una de las farmacias de Montevideo, que llegaron a tener filas de hasta media cuadra y demoras en la atención cercanas a la hora.

Xavier Ferreyra fue uno de los primeros compradores. Lo hizo en una farmacia de Ciudad Vieja, y a su salida del local afirmó que "Uruguay dio un paso muy grande. Con este mecanismo me garantizo en una farmacia que no tengo que ir a comprarla a cualquier tugurio como lo hacía antes, y además la calidad, porque aquí pasa por controles del Estado". Ferreyra, está seguro que esta medida garantizará seguridad y calidad a la hora de consumir y también cree que ya no se verá al consumidor de cannabis como alguien al margen de la ley.

Frente a las cámaras del diario uruguayo El País pasaron varios de los pioneros en adquirir el curioso y novedoso producto de las farmacias. Las opiniones estuvieron, en general, enfocadas a una reducción en la búsqueda de la planta en lugares que rayaban con el mundo criminal, aplaudiendo así una medida que también consideran beneficiosa en cuanto a los ojos con que los mirarán de ahora en adelante.

“Es un día histórico para todos los uruguayos el poder venir, comprarse su faso (marihuana), armarlo y llevarlo. A veces lo comprás por el mercado negro y te sale al doble”, dijo a El País un hombre de unos 35 años. “Yo siempre fumé, pero nunca fue legal. Desde los 13 años que fumo y tengo 55… Vamos a ver cómo es, voy a probar, si no ‘pega’ (hace efecto) sigo comprando a la mafia”, contrarió una señora que, antes de comprar, dudaba de los efectos que le pudiera causar.

Un joven comparó los miles de bares que ofrecen alcohol con la innovadora fórmula uruguaya, afirmando que después de hoy consumir una u otra sustancia será lo mismo. “La marihuana tiene que venderse en forma pública y no en bocas de droga. En esta farmacia y en otras tres se vende marihuana, y en muchos bares se vende droga etílica: son cosas diferentes, pero hoy son legales”, manifestó. (Vea: Ya se puede comprar marihuana en las farmacias de Uruguay)

Para una joven de aproximadamente 25 años, la iniciativa permitirá dejar atrás tabúes de la sociedad uruguaya, que desde hoy tendrá otro chip respecto al consumo de esta sustancia. “Es un día muy importante porque se está generando un cambio en la sociedad. Hace que ciertas cosas que quizás hacen un aporte a la sociedad se naturalicen y se vuelvan más comunes para las personas. Hace que se dejen de ser tabú ciertas cosas que quizás no son tanto y que puede tener cosas positivas”, dijo.

También coincidieron varios compradores en que, desde hoy, evitarán comprar lo que habitualmente se fuma en Uruguay: una marihuana prensada proveniente de Paraguay y de muy poca calidad, que a su vez es la más fácil de conseguir “Es histórico. Yo he tenido plantas y es diferente, lo que venden ahora es un cannabis prensado… estás fumando porquería”, aseguró un joven a la prensa local. "Fumo desde los 14 años. Ahora tengo 37 y voy a poder conseguirla legalmente. Y no voy a fumar más prensado paraguayo", agregó a AFP un hombre que entró de compras con su pequeño hijo y salió con un paquete de cada tipo.

Otras reacciones

"¡Quién lo hubiera imaginado! La ventaja son la seguridad y comodidad de ir a una farmacia. Estoy con la liberación de todas las drogas": Luis, jubilado de 65 años.

"Me siento muy suertuda de poder conseguirla libremente, tengo amigos en otros países que van presos por fumar un porro. No estoy de acuerdo con que se lleve un registro porque con los consumidores de alcohol no lo hacen. Pero bueno, creo que es un avance": Camila Berro, 24 años, estudiante de administración de empresas.

"Tengo un montón de amigos consumidores en otros países que tienen que recurrir al mercado ilegal, lamentablemente, entonces para mi está buenísimo. Me siento super afortunada. Es un antes y un después", aseguró Camila con uno de los cogollos (flores) en su mano.

“Creo que el Estado, al hacerse responsable, también muestra otra forma de combatir al narcotráfico. Ojalá un día puedan legalizarse un montón de drogas más", Xavier Ferreyra, empleado público de 32 años.

El amanecer de este jueves en Montevideo fue distinto. La tradicional tranquilidad en las calles contrastaba con la prisa de decenas de uruguayos que madrugaron a escribir una página en la historia del continente. Sin saberlo, se convirtieron en las primeras personas del mundo en adquirir marihuana estatal para uso recreativo, en cuatro de las 16 farmacias que se habilitaron para el comercio de la planta en todo el país. Lo histórico del día se cerró con un stock agotado en todos los locales de la capital uruguaya. (Lea: Al fin llega la marihuana a las farmacias uruguayas)

Monitor Cannabis, un equipo multidisciplinario que investiga sobre la regulación en Uruguay, calcula que hay unos 160.000 consumidores de marihuana en un país de 3,4 millones de habitantes. De ese total, al menos unas 60.000 personas la usan de forma habitual. El Gobierno fijó el precio de venta al público en aproximadamente 1,30 dólares el gramo, y limitó a 40 la cantidad de gramos que puede adquirir al mes un usuario. Se venderán dos variedades en empaques totalmente sellados: "Alfa I" (indica) y "Beta I" (sativa).

“Es gracioso: en dos horas vendimos apenas tres medicamentos, pero hubo 30 personas que llegaron para comprar marihuana", dijo a la agencia AFP la vendedora de una de las farmacias de Montevideo, que llegaron a tener filas de hasta media cuadra y demoras en la atención cercanas a la hora.

Xavier Ferreyra fue uno de los primeros compradores. Lo hizo en una farmacia de Ciudad Vieja, y a su salida del local afirmó que "Uruguay dio un paso muy grande. Con este mecanismo me garantizo en una farmacia que no tengo que ir a comprarla a cualquier tugurio como lo hacía antes, y además la calidad, porque aquí pasa por controles del Estado". Ferreyra, está seguro que esta medida garantizará seguridad y calidad a la hora de consumir y también cree que ya no se verá al consumidor de cannabis como alguien al margen de la ley.

Frente a las cámaras del diario uruguayo El País pasaron varios de los pioneros en adquirir el curioso y novedoso producto de las farmacias. Las opiniones estuvieron, en general, enfocadas a una reducción en la búsqueda de la planta en lugares que rayaban con el mundo criminal, aplaudiendo así una medida que también consideran beneficiosa en cuanto a los ojos con que los mirarán de ahora en adelante.

“Es un día histórico para todos los uruguayos el poder venir, comprarse su faso (marihuana), armarlo y llevarlo. A veces lo comprás por el mercado negro y te sale al doble”, dijo a El País un hombre de unos 35 años. “Yo siempre fumé, pero nunca fue legal. Desde los 13 años que fumo y tengo 55… Vamos a ver cómo es, voy a probar, si no ‘pega’ (hace efecto) sigo comprando a la mafia”, contrarió una señora que, antes de comprar, dudaba de los efectos que le pudiera causar.

Un joven comparó los miles de bares que ofrecen alcohol con la innovadora fórmula uruguaya, afirmando que después de hoy consumir una u otra sustancia será lo mismo. “La marihuana tiene que venderse en forma pública y no en bocas de droga. En esta farmacia y en otras tres se vende marihuana, y en muchos bares se vende droga etílica: son cosas diferentes, pero hoy son legales”, manifestó. (Vea: Ya se puede comprar marihuana en las farmacias de Uruguay)

Para una joven de aproximadamente 25 años, la iniciativa permitirá dejar atrás tabúes de la sociedad uruguaya, que desde hoy tendrá otro chip respecto al consumo de esta sustancia. “Es un día muy importante porque se está generando un cambio en la sociedad. Hace que ciertas cosas que quizás hacen un aporte a la sociedad se naturalicen y se vuelvan más comunes para las personas. Hace que se dejen de ser tabú ciertas cosas que quizás no son tanto y que puede tener cosas positivas”, dijo.

También coincidieron varios compradores en que, desde hoy, evitarán comprar lo que habitualmente se fuma en Uruguay: una marihuana prensada proveniente de Paraguay y de muy poca calidad, que a su vez es la más fácil de conseguir “Es histórico. Yo he tenido plantas y es diferente, lo que venden ahora es un cannabis prensado… estás fumando porquería”, aseguró un joven a la prensa local. "Fumo desde los 14 años. Ahora tengo 37 y voy a poder conseguirla legalmente. Y no voy a fumar más prensado paraguayo", agregó a AFP un hombre que entró de compras con su pequeño hijo y salió con un paquete de cada tipo.

Otras reacciones

"¡Quién lo hubiera imaginado! La ventaja son la seguridad y comodidad de ir a una farmacia. Estoy con la liberación de todas las drogas": Luis, jubilado de 65 años.

"Me siento muy suertuda de poder conseguirla libremente, tengo amigos en otros países que van presos por fumar un porro. No estoy de acuerdo con que se lleve un registro porque con los consumidores de alcohol no lo hacen. Pero bueno, creo que es un avance": Camila Berro, 24 años, estudiante de administración de empresas.

"Tengo un montón de amigos consumidores en otros países que tienen que recurrir al mercado ilegal, lamentablemente, entonces para mi está buenísimo. Me siento super afortunada. Es un antes y un después", aseguró Camila con uno de los cogollos (flores) en su mano.

“Creo que el Estado, al hacerse responsable, también muestra otra forma de combatir al narcotráfico. Ojalá un día puedan legalizarse un montón de drogas más", Xavier Ferreyra, empleado público de 32 años.