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El secretario general del organismo, José Miguel Insulza, lamentó que eso no ocurriera, pues considera que el sistema de observación de la OEA es de “los mejores”, al que solicitan muchos países de la región.
La decisión no sorprende, porque desde los días de Hugo Chávez, los roces son constantes con la Organización, en la que Caracas denuncia un mando claro de Estados Unidos. Por esa razón y como sucedió el 7 de octubre, al proceso electoral lo acompañará una misión de Unasur, que presidirá el argentino Carlos Álvarez, actual secretario general de la Asociación Latinoamericana de Integración (Aladi). El coordinador de dicha misión será el vicepresidente de la Corte Electoral de Uruguay, Wilfredo Penco.
La campaña de los dos candidatos continúa adelantándose entre polémicas y acusaciones mutuas. Incluso, los rectores del Consejo Nacional Electoral han entrado en las rencillas: uno de ellos, Vicente Díaz, aseguró que las elecciones serán “profundamente antidemocráticas”, por la visibilidad que se le está dando desde el gobierno a Maduro, por encima de Capriles. Otra de las rectoras, Tibisay Lucena, afirmó que todas las acusaciones contra el CNE tienen el único fin de poner en duda la transparencia de la que gozará el proceso.
José Migue Insulza entregó su parecer: “Yo no tengo preocupación, por así decirlo, de un fraude. La preocupación es que el gobierno y la oposición no se hablen. No existe un diálogo político, relación entre fuerzas políticas, que debería existir siempre”.
Por Redacción Internacional
