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Horas después de ser procesado en Manhattan por cargos derivados de fraude comercial, el expresidente Donald Trump se dirigió a sus seguidores en Mar-a-Lago para defenderse de las acusaciones en su contra.
“No hay crimen”, enfatizó Trump. “Resulta que prácticamente todos los que han visto este casoicen que no hay delito y que nunca debería haberse presentado. Incluso las personas que no son grandes fanáticos lo han dicho”, agregó entre aplausos.
En la tarde del martes, Trump se declaró inocente ante el juez Juan Merchán, quien le leyó los 34 cargos de los que se le acusa, todos relacionados con fraude comercial por su participación en el presunto pago de un soborno a la actriz de cine para adultos Stormy Daniels. Así, el republicano se convirtió en el primer expresidente en ser procesado por cargos penales.
Pero, si bien se esperaba una saga de improperios y ataques contra los fiscales de Nueva York, el discurso tomó pronto un giro diferente: en lugar de habar de los procedimientos del martes, Trump dedicó el mayor tiempo a defenderse sobre las otras investigaciones que cursan en su contra.
En particular, Trump apuntó a la fiscal del distrito de Fulton, Georgia, quien dirige una investigación en su contra por una posible injerencia en el proceso electoral de ese estado en 2020.
“Entre bastidores tienen a una fiscal de distrito demócrata local y racista en Atlanta que está haciendo todo lo que está a su alcance para acusarme en una llamada telefónica absolutamente perfecta”, dijo Trump, refiriéndose a su llamada al secretario de Estado de Georgia pidiéndole que encontrar suficientes votos para inclinar los resultados a su favor.
También atacó al fiscal especial Jack Smith, quien supervisa las investigaciones del Departamento de Justicia sobre el manejo que le dio a los documentos clasificados tras su salida de la Casa Blanca.
“Un lunático de izquierda radical conocido como un lanzador de bombas que está acosando a cientos de mi gente día tras día por el engaño de las cajas”, dijo Trump en referencia a Smith.
El expresidente pasó un tiempo considerable pronunciándose sobre estos dos casos, que son de lejos mucho más graves que la investigación por la que se le procesó penalmente el martes.
Ataques a Bragg y Trump
Eso sí: sobre el caso en Manhattan no se guardó los ataques contra el fiscal del distrito Alvin Bragg, quien dirige la investigación. Trump dijo sobre Bragg que tiene “un distrito local fallido acusando a un expresidente de los Estados Unidos por primera vez en la historia sobre la base de que todos los expertos y analistas legales dijeron que no hay caso”.
Sobre Juan Manuel Merchán, el juez de raíces colombianas que leyó los cargos en su contra, declaró que es un “juez que odia a Trump con una esposa y una familia que odian a Trump”.
El discurso no pasó de los 20 minutos, un cambio considerable comparado con las palabras que ofreció Trump en el lanzamiento de su campaña a la presidencia el pasado noviembre, cuando habló por casi dos horas.
El juez Merchán fijó la próxima fecha de audiencia de este caso para el 4 de diciembre.
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