Hace un año Isabela*, que trabajaba en una firma de arquitectura en Colombia, se fue a Alemania junto con su esposo, su hijo y su cuñado. Apenas pisaron Berlín, todos solicitaron asilo, aunque no había una razón de peso para hacerlo: ninguno era perseguido político. ¿La razón? Un familiar, que tampoco tenía razones para ser asilado, ya había empezado su propio proceso. Vieron una oportunidad.
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Esta, lamentablemente, es una cara de la moneda. La falsificación de documentos en procesos de solicitud de asilo por parte de colombianos continúa preocupando a autoridades europeas. El alto comisionado para acuerdos de migración del Gobierno Federal de Alemania, Joachim Stamp, estuvo de visita en Colombia para abordar junto con el Gobierno colombiano esta situación y ejecutar respuestas prontas antes de tomar una decisión más radical, como la imposición de un visado a los colombianos, tal y como lo hizo Reino Unido hace un par de semanas, justificándose en un panorama similar.
“Lo que queremos recalcar es que no usen la figura del asilo en Alemania. Eso solamente está dado para aquellas personas que han sido objeto de persecución política. Esto es muy importante, porque sabemos que hay personas que están ganando dinero con esto. Les dicen: ‘Vamos a crear una historia falsa’, en la que vamos a decir que es un perseguido político. Pero las entidades alemanas y sus instituciones no van a caer en esa trampa. Esto queda evidenciado en el alto porcentaje de denegación (del 99.7 %) de las solicitudes”, comentó Stamp en entrevista con El Espectador.
El comisionado señaló que “la probabilidad u oportunidad de que les sea concedido asilo en Alemania es prácticamente casi cero. Solo el 0.3 % de las solicitudes son concedidas y el 99.7 % son denegadas”. Alemania, añadió, ha acelerado estos procesos de asilo, “de tal manera que el año entrante va a haber muchísimo ciudadano que va a tener que regresar (a Colombia)”. Lo que se quiere no es sembrar el alarmismo, y lamentó los titulares amarillistas de algunos medios con respecto a este tema. Alemania, destaca, busca “mostrar que hay caminos legales hacia el país, a través de la Ley de Inmigración de Trabajadores Especializados o mano de obra especializada”.
No obstante, Stamp también fue contundente al hablar sobre la posibilidad de un visado. “Nosotros, junto con el Gobierno colombiano, queremos precisamente evitar esta situación. En el momento en que las solicitudes de asilo ya no se den más, podemos obviar esta situación, pero hay que decir la verdad: en los círculos europeos se está debatiendo y discutiendo este tema. Para nosotros no es la meta. Nuestro objetivo es realmente que ya no se den más solicitudes”, declaró.
El comisionado no habló de qué otros países están considerando medidas similares, aunque comentó que la imposición de visados a Colombia “fue debatido a nivel europeo de manera informal”. Alemania y Reino Unido no son los únicos países europeos que han visto un importante aumento de solicitudes de asilo por parte de colombianos. Y es que, según cifras de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), Colombia es el segundo país con más solicitantes de asilo entre los 38 miembros de la Organización.
“En 2018 teníamos (en Alemania) 135 solicitudes de asilo por parte de colombianos, y en este año ya hemos tenido más de 3.500. Mirando todos los últimos años tenemos casi 9.000 procesos de asilo por parte de colombianos que están en curso”, dijo Stamp.
España, Portugal y Francia son otros de los países europeos que presentan un gran número de solicitantes de asilo de nacionales. Colombia se ubica entre las tres nacionalidades con más solicitantes para los primeros dos países, un podio que comparte con Gambia y Afganistán, en el caso portugués, y con Venezuela y Perú, en el caso español.
“Nosotros tenemos la impresión de que también hay estructuras que ganan dinero con el hecho de malinformar a las personas, y este también es uno de los puntos con el Gobierno colombiano. Queremos trabajar conjuntamente en que se defina qué es la solicitud de asilo y que las personas tengan una mejor información sobre los caminos legales que existen para acceder a Alemania”, explica Stamp.
El comisionado dice que se está trabajando junto con el Gobierno colombiano en una campaña informativa masiva, no solamente por televisión, sino también a través de las redes sociales. “Queremos precisamente transmitir el mensaje de que el asilo es el camino erróneo”, destaca. Luego, sin embargo, está la otra cara de la moneda.
Es cierto que las solicitudes de asilo de colombianos han aumentado de manera inusual en un 131 %, según recoge el documento “International Migration Outlook” 2024. También es cierto que muchas personas, como el caso inicial, se han aprovechado de la buena fe de las autoridades migratorias y han mentido en sus procesos. De hecho, está bien documentado que hay canales y figuras en línea que ofrecen consejos para “ganar” los casos de asilo, así sea mediante trampas y mentiras. Aunque la teoría del abuso en las solicitudes de asilo por colombianos como una justificación para imponer un visado –como lo hizo Reino Unido- ha sido muy cuestionada por expertos en la materia.
“Es importante que no busquemos causas fáciles o una sola. Sería muy cauta a la hora de pensar en la idea de que muchas solicitudes son falsas, como se lee en la prensa o en declaraciones de políticos y embajadores. No digo que no haya solicitudes falsas: siempre las ha habido y siempre las habrá. Pero en el caso de los colombianos, hay que destacar que llevan décadas solicitando asilo y que ha estado invisibilizado. Ha tenido sus picos. Este incremento tan alto, por ejemplo, en España se observa desde 2016, así que no es algo nuevo”, señaló Anastasia Bermúdez, profesora de antropología social en la Universidad de Sevilla y estudiosa de las migraciones colombianas a España, en el programa “Análisis UNAL”, de la Radio de la Universidad Nacional.
Pese a la firma del Acuerdo de Paz en 2016, hay que recordar que la violencia en el país persiste y, como se observa en las cifras, la magnitud en las solicitudes de asilo no es algo que creció desde el año pasado: a partir de 2016 se viene presentando un aumento exponencial que no solo se ve en migración hacia el exterior, sino en desplazamiento interno. También hay que destacar que las solicitudes de asilo de colombianos han incrementado no solo en Europa, sino también en países como Chile y Perú, Estados que no han puesto en la mesa –al menos púbicamente- la imposición de visa a colombianos para enfrentar los procesos de asilo con documentación falsa, por lo que algo está pasando de fondo.
“(Además), cuando hablamos de que el aumento de solicitudes se debe en gran parte a solicitudes falsas, es importante tener en cuenta que la mayoría de ellas son rechazadas. Por tanto, no es una manera fácil de entrar y quedarse en un país”, agrega Bermúdez.
Hay que destacar, en este contexto, que las solicitudes de asilo en Alemania son extremadamente difíciles, incluso para las víctimas que sí tienen respaldos para hacer el proceso, según un reportaje de la agencia alemana Deutsche Welle de 2020. Jürgen Bast, profesor de la Universidad Justus Liebig, de Gießen, y experto en derecho de asilo, le explicó a la DW que Alemania se rige por las leyes del sistema de asilo de la Unión Europea y que la posibilidad de asilo depende mucho de la intensidad de un conflicto y si sufre persecución en forma individual. Es decir, incluso para quienes no se inventan una historia, el asilo es un camino complicado, por lo que es entendible que hablar de las solicitudes falsas como justificación para imponer medidas como un visado sea tan cuestionado por expertos.
Aunque la discusión sigue levantando dudas, es claro que en Europa sí se están planteando medidas tajantes a las dinámicas de solicitudes falsas. No solo se trata de imposición de un visado, sino de expulsiones y castigos específicos a quienes incurren en estas falsificaciones, una ruta más idónea para que no se convierta en una situación clásica del “por unos pocos pagan todos”.
“El que solicita asilo debe tener muy presente que muy rápidamente tiene que devolverse”, señala Stamp. Según el comisionado, “en el pasado, estos procesos de solicitud requerían mucho tiempo en Alemania. Esto condujo a que aquel que solicitaba asilo podía quedarse en el país hasta resolver su situación. Esto cambió, pues desde hace tres semanas tenemos ya un proceso acelerado para colombianos, de tal manera que de ahora en adelante estos procesos se van a analizar en muy pocas semanas”.
Esto, en otras palabras, significa que Alemania va a acelerar sus procesos de deportación para quienes incurran en falsificación de solicitudes de asilo. Además de esto, Stamp resalta que “a todos aquellos que sean deportados, ahora no se les permitirá el ingreso a Alemania por cinco años”. El gobierno alemán “tiene la esperanza de que muchos de ellos regresen voluntariamente a Colombia para luego tener la opción de acceder en Alemania por los caminos legales”.
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