Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
El Ministerio de Interior de España anunció el desmantelamiento de una red organizada de tráfico con sede en España que se encargaba de camuflar estupefacientes en cajas de ayuda humanitaria con destino a Ucrania.
A través de la “Operación Marlin”, como lo denominó la Guardia Civil española, se rastreó toda la ruta de distribución de las sustancias que la red se encargaba de traficar, especialmente cannabis. El operativo se realizó en varias localidades del sur de Andalucía como Sevilla, Málaga y Granada.
El grupo compuesto por individuos oriundos de Marruecos, España, Alemania y Ucrania llegaba a las 30 personas. Cada persona tenía funciones que iban desde aprovisionar de marihuana en Andalucía, empaquetarla en cajas de cartón rotulada como ayuda humanitaria y despacharla en “caravanas solidarias”, según informó el Ministerio de Interior Español en un comunicado.
En el mismo anuncio del Ministerio, se afirma que el grupo pretendía “pasar desapercibidas ante los controles policiales y fronterizos” para “remitirla a diferentes países de Europa”.
El operativo para llegar a desmantelar la red de tráfico se desarrolló en dos momentos clave. En un primer momento se capturó en Fuengirola (Málaga) a cuatro miembros de la organización junto con 109 kilogramos de marihuana envasada al vacío ya empacada en cajas de ayuda humanitaria.
Le puede interesar: Wade Davis: la fracasada guerra contra las drogas
Estos hechos ayudaron a ampliar el espectro de investigación y registrar las sedes donde esta red operaba. Tras estos registros domiciliarios, la Guardia Nacional logró incautar “740.00 euros, 25.520 dólares americanos, 20 kilogramos de cogollos de marihuana, 1.000 plantas de marihuana, y un arma corta de fuego, así como todo tipo de material policial […] chalecos balísticos, dispositivos de seguimiento GPS”.
El segundo hecho de la operación se basó en localizar a los proveedores de cannabis y capturarlos. Estas capturas tuvieron un resultado de 11 distribuidores y 14 miembros más de la banda.
Los vehículos que movilizaban las cajas de ayuda humanitaria con cannabis estaban registrados y tenían matrículas ucranianas.
La Guardia Nacional capturó los miembros de la red. También fueron acusados de tráfico de drogas, tenencia ilícita de armas, defraudación de fluido eléctrico y formar parte de organización criminal.
Una red más en España, el mismo problema
Son numerosas las redes de tráfico que han caído en España y Europa en lo corrido de 2022. Esto se debe, según reporta el diario El País, al “megaboom de la marihuana” y factores desencadenantes de la pandemia.
Las cifras demuestran que es un flagelo que ha ido en aumento y cada vez más bandas se han ido involucrando en acaparar estos mercados. De acuerdo con el informe del Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado, en 2020 hubo incautaciones a gran escala de estupefacientes. Por ejemplo, se confiscó 1,5 millones de plantas de cannabis, 37 toneladas de cocaína y casi 350 toneladas de hachís. Además, más de 20 mil personas fueron detenidas por cargos relacionados con narcotráfico.
Le puede interesar: Informe de Comisión Global de Política de Drogas pide legalización en Colombia
El diario El País reportó que un alto mando policial de la Unidad de Drogas y Crimen Organizado de la Policía Nacional española muestra preocupación ante este problema. “Podemos desarticular grupos más fuertes o más pequeños, pero seguirán otros, que además tratarán de imponerse y ocupar los espacios vacantes como vemos en los violentos enfrentamientos entre organizaciones rivales en la Costa del Sol”, aseguró el funcionario.
Como señala este mando policial, un informe del Observatorio Europeo de las Drogas y las Toxicomanías, los principales consumidores a nivel europeo son Suiza, Países Bajos y Bélgica. Además, es el cannabis el que más se consume en promedio diario en Europa, con una cifra de aproximadamente 22,2 millones de consumidores en 2020.
👀🌎📄 ¿Ya se enteró de las últimas noticias en el mundo? Le invitamos a verlas en El Espectador.
