Los US$60.000 millones de EE. UU. a Ucrania, una cuestión de supervivencia

En el Senado de Estados Unidos, con 80 votos a favor y 19 en contra, se llevó a cabo una votación trascendental para Ucrania: la aprobación de un paquete de ayuda de 60.000 millones de dólares, después de meses de trabas por parte de los republicanos para desembolsar desde el Congreso un monto para financiar la ayuda militar que Kiev ha pedido insistentemente desde el inicio de la guerra, el 24 de febrero de 2022. El fin de semana se dio un primer paso para ello: la Cámara de Representantes le dio el visto bueno a que el dinero, exactamente 95.000 millones de dólares, se repartiera entre Ucrania, Israel y Taiwán. Ahora hace falta que Joe Biden ponga su firma para que esto se convierta en ley.

En el Senado de Estados Unidos, con 80 votos a favor y 19 en contra, se llevó a cabo una votación trascendental para Ucrania: la aprobación de un paquete de ayuda de 60.000 millones de dólares, después de meses de trabas por parte de los republicanos para desembolsar desde el Congreso un monto para financiar la ayuda militar que Kiev ha pedido insistentemente desde el inicio de la guerra, el 24 de febrero de 2022. El fin de semana se dio un primer paso para ello: la Cámara de Representantes le dio el visto bueno a que el dinero, exactamente 95.000 millones de dólares, se repartiera entre Ucrania, Israel y Taiwán. Ahora hace falta que Joe Biden ponga su firma para que esto se convierta en ley.

Previo a conocer esos resultados, dos funcionarios estadounidenses anónimos le confirmaron a Reuters que la nueva asistencia incluiría vehículos, municiones de defensa aérea Stinger, municiones antitanques TOW y Javelin, y munición adicional para sistemas de cohetes de artillería de alta movilidad. El paquete también tendría proyectiles de artillería de 155 milímetros y “otras armas que pueden utilizarse inmediatamente en el campo de batalla”. Según informó la agencia, parte de la ayuda militar estadounidense a Kiev ya se encuentra en Alemania y Polonia, lo que reduce el tiempo necesario para que las armas y el equipo lleguen a la línea del frente.

En este momento, Ucrania se enfrenta a una escasez de soldados y de municiones, que la debilita ante la constante presión de las tropas rusas en el este. De hecho, el jefe de la inteligencia militar ucraniana, Kirilo Budanov, advirtió que la situación puede empeorar hacia mediados de mayo y principios de junio, pues será “un período difícil”. Pero no es el único que se ha pronunciado al respecto. Hace apenas una semana, el director de la CIA, William Burns, les advirtió a los legisladores estadounidenses que la urgencia de aprobar ayuda a Kiev tiene que ver con la necesidad de evitar posibles pérdidas en la guerra contra Moscú. El funcionario enfatizó que, con asistencia militar, Ucrania podría mantenerse firme hasta 2024. Sin ella, sin embargo, existe un riesgo significativo de derrota y “el panorama es mucho más terrible”.

“Efectivamente, es una situación compleja”, dice el internacionalista Jesús Agreda Rudenko: “Hay limitaciones materiales y humanas, y por los dos lados hay serios problemas”. El analista, también docente en la Universidad del Rosario, se refiere a la necesidad que tiene Kiev de defensa antiaérea, “porque, de lo contrario, Rusia terminará eliminando por completo la infraestructura energética del país, y eso no solo golpeará la moral, sino también la capacidad de funcionamiento del Estado”. Ucrania, menciona él, depende completamente de la ayuda internacional. Eso significa que sus planes de defensa están estrictamente vinculados a esos recursos: “Sin apoyo, Ucrania será derrotada”.

Pero hay un problema aún más difícil de resolver, y es que el país se está quedando sin hombres. De hecho, ante los datos oficiales que estiman que más de 31.000 soldados han muerto en batalla, se están tomando medidas para hacer que los ucranianos en el exterior regresen al país a combatir. Para ello, Kiev suspendió sus servicios consulares fuera de sus bordes para los hombres entre 18 y 60 años, lo que significa que quedan interrumpidos los servicios de renovación de documentos de identidad, entro otros procedimientos administrativos, para ellos. Alrededor de unos 14 millones de ucranianos, casi un tercio de la población, huyeron de sus hogares en algún momento de la guerra. La Organización Internacional para las Migraciones estima que más de 4,5 millones han regresado, ya sea desde otros países o desde el desplazamiento interno del cual fueron víctimas.

Para justificar la decisión, el canciller Dmytro Kuleba escribió en X: “El hecho de estar en el extranjero no dispensa a ningún ciudadano de sus deberes para con la patria”. Sin embargo, las críticas no demoraron en llegar. En Facebook, Serguii Petukhov, exviceministro de Justicia, respondió: “Esto no obligará a ningún hombre que se haya ido al extranjero [...] a volver a Ucrania e ir a combatir”.

En este contexto, la aprobación de este monto, al menos para Agreda Rudenko, es algo “enorme”: “La capacidad de aguantar de Ucrania depende de la ayuda internacional. Aunque hay compromisos de otros aliados, pues hay iniciativas de República Checa, Francia o Alemania, la verdad es que uno de los principales productores y poseedores de municiones y equipos militares es Estados Unidos”. El paquete de ayuda, cree el internacionalista, es esencial para la supervivencia del país, sobre todo en verano, que las condiciones pueden ser óptimas para una ofensiva. Ahora bien, también reconoce que cada vez es más difícil justificar el envío de recursos a este tipo de conflictos, sobre todo del lado republicano, pues se escuchan voces que dicen que se deben privilegiar políticas domésticas, justo en época electoral.

📧 📬 🌍 Semana a semana tendremos un resumen de las noticias que nos harán sentir que No es el fin del mundo. Si desea inscribirse y recibir todos los lunes nuestro newsletter, puede hacerlo en el siguiente enlace.

👀🌎📄 ¿Ya se enteró de las últimas noticias en el mundo? Invitamos a verlas en El Espectador.

Si le interesan los temas internacionales, quiere opinar sobre nuestro contenido o recibir más información, escríbanos al correo mmedina@elespectador.com o aosorio@elespectador.com