Unos periodistas de la AFP en Izium, una ciudad del este de Ucrania recientemente liberada, vieron este viernes cientos de tumbas donde fueron enterrados civiles y militares muertos durante los combates y la ocupación rusa. Según las autoridades locales, se encontraron un total de 443 tumbas en un bosque cerca de la ciudad, incluyendo una fosa con los restos de 17 soldados ucranianos.
Según Oleg Kotenko, responsable gubernamental para la búsqueda de personas desaparecidas, las tumbas fueron cavadas durante los combates ocurridos en el momento de la toma de la ciudad por las fuerzas rusas en marzo, así como durante su ocupación, que terminó la semana pasada. Algunas de ellas contienen los restos de varias personas.
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“Las tumbas que no llevan nombre son las de la gente (encontrada) en la calle”, indicó Kotenko, añadiendo que “muchas murieron de hambre. Esta parte de la ciudad estaba aislada, sin suministros. La gente estaba bloqueada, no funcionaba nada”.
El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos indicó que quiere enviar “pronto” un equipo a Izium para “determinar las circunstancias de la muerte de esas personas”.
Las imágenes de tortura que se repiten
Al mismo tiempo, el jefe de la policía ucraniana, Igor Klimenko, anunció el hallazgo de “diez salas de tortura” en unas de las localidades reconquistadas en la región de Járkov, dos de ellas en la ciudad de Balakliya.
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, visitó el miércoles Izium, en su primer viaje a esta región fronteriza con Rusia desde la partida de las fuerzas de ocupación, expulsadas gracias a una contraofensiva lanzada a inicios de mes en varios frentes.
El consejero de la presidencia ucraniana, Mijailo Podoliak, indicó el viernes que esas tumbas son apenas “uno de los lugares de entierros masivos descubiertos cerca de Izium”. “Durante meses, el terror, la violencia, la tortura y los asesinatos en masa reinaron en los territorios ocupados”, destacó.
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La AFP se desplazó a Izium, una ciudad que contaba con 50.000 habitantes antes de la guerra, poco después de la partida de las fuerzas rusas en la noche del sábado al domingo. La devastación era evidente: las casas y los edificios administrativos destruidos en los combates y los restos de blindados esparcidos por las carreteras.
Zelenski comparó el jueves el hallazgo de Izium con el de Bucha, una localidad en la periferia de Kiev, donde se hallaron los cadáveres de civiles ejecutados tras la partida de las tropas rusas a finales de marzo. Moscú negó haber cometido esos crímenes.
En el frente, este viernes resultaron heridas doce personas en bombardeos rusos “masivos” en zonas recientemente liberadas por las fuerzas ucranianas en la región de Járkov. Otras cuatro personas fueron heridas en esta ciudad, según las autoridades regionales.
En la región separatista prorrusa de Lugansk, en el Donbás (este), el fiscal general, Serguéi Gorenko, murió junto con su adjunta, Ekaterina Steglenko, en una explosión en las oficinas donde trabajaba, indicó el líder separatista local.
¿Dónde continúan los combates en Ucrania?
En la zona de Lugansk proseguían los “combates de posiciones”, y en la región vecina de Donetsk los bombardeos rusos, en particular sobre Bajmut, causaron cinco muertos y seis heridos, indicó la Presidencia ucraniana.
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En el frente sur, donde las fuerzas ucranianas están enfrentando una mayor resistencia que en Járkov, “la situación sigue siendo difícil”, aunque el ejército de Kiev continúa bombardeando los puentes utilizados por las tropas del Kremlin, según la misma fuente.
Tras la invasión iniciada el 24 de febrero, los occidentales adoptaron una larga serie de sanciones contra Rusia y facilitaron armas a Kiev. En este marco, Washington validó el jueves un nuevo paquete de ayuda militar a Ucrania de US$600 millones. Hasta el momento, Estados Unidos ha entregado más de US$15.000 millones en ayuda militar a Kiev.
En una visita a la capital ucraniana el jueves pasado, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, prometió que la Unión Europea estará al lado de Ucrania “el tiempo que haga falta”, y abogó en una entrevista con un canal alemán para que el presidente ruso, Vladimir Putin, comparezca algún día ante la justicia internacional.
Por otro lado, Putin se reunió con el presidente chino, Xi Jinping, en Uzbekistán, durante una cumbre regional en la que destacó la influencia creciente de los “nuevos centros de poder” frente a Occidente. Y es que, en los últimos meses, Moscú se ha esforzado en reforzar sus vínculos con Asia para contrarrestar las sanciones occidentales impuestas en represalia por la invasión de Ucrania.
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