Lucile Randon, también conocida como la hermana André, fue una monja considerada como la persona más anciana del mundo. Falleció este martes 17 de enero de 2023 a los 118 años, mientras dormía en Sainte-Catherine Laboure Francia, hogar geriátrico del que hacía parte.
David Tavella, fuente perteneciente al asilo, cuenta que hay una gran tristeza por su muerte, pero el deseo de Randon era unirse a su amado hermano afirmando que para ella el suceso sería una liberación.
La francesa, nacida el 11 de febrero de 1904, ocupó durante muchos años el segundo lugar del libro Guiness records con el título de la persona más longeva del mundo, sOlo siendo superada por la japonesa Kane Tanaka, de 119 años, quien falleció en 2022 y, a partir de allí, Randon fue reconocida oficialmente como la primera en abril de 2022.
Su fallecimiento fue informado por Hubert Falco, alcalde de la ciudad, quien anunció la noticia a través de su cuenta de twitter. “Es con inmensa tristeza y muchas emociones que me entero del fallecimiento esta noche de nuestra decana de la Humanidad #SisterAndré”.
Una vida dedicada al servicio
Según un comunicado publicado por Guinness en abril de 2022, la hermana André dedicó la mayor parte de su vida al servicio religioso. Antes de convertirse en monja católica, cuidó niños durante la Segunda Guerra Mundial y luego pasó 28 años asistiendo a huérfanos y ancianos en un hospital.
Uno de sus mejores recuerdos fue el regreso de dos de sus hermanos al final de la Primera Guerra Mundial, dijo a la agencia AFP en una entrevista en su 116 cumpleaños. “Era raro en las familias, que por lo general tenían dos muertos en lugar de dos vivos. Ambos regresaron”, dijo.
Le sugerimos leer: Perú: manifestantes avanzan hacia Lima para exigir la renuncia de Dina Boluarte.
Trabajó como institutriz en París para los hijos de familias adineradas, un período que una vez llamó “el momento más feliz de su vida”. Se convirtió al catolicismo y fue bautizada a la edad de 26 años.
Se unió a la orden de monjas de las Hijas de la Caridad a la edad de 41 años, cuando la hermana André, entonces asignada a un hospital en Vichy, trabajó durante 31 años.
Luego se mudó a Toulon, en la costa mediterránea, lugar en el que sus días en el hogar de ancianos estaban marcados por la oración, las comidas y las visitas de los residentes y los trabajadores del hospicio.
Cuando cumplió 118 años en 2022, la monja recibió una nota de cumpleaños escrita a mano por el presidente francés Emmanuel Macron, el decimoctavo presidente francés de su vida. También ha habido 10 papas diferentes presidiendo la Iglesia Católica desde que ella nació.
Así mismo, fue considerada según Guiness como la monja más anciana del mundo.
Su estado de salud
Al realizar conferencias de prensa se refería constantemente a su trabajo afirmando que este, así como el cuidado de las demás personas, eran las dos cosas que la habían mantenido viva por tanto tiempo. “La gente dice que el trabajo mata, pero a mí el trabajo me mantuvo viva. Seguí trabajando hasta los 108 años”, afirmó.
Perdió la vista y dependía de una silla de ruedas para trasladarse de un lugar a otro, pero, aún así, solía cuidar a otras personas mucho más jóvenes que ella. “La gente debería ayudarse y amarse en lugar de odiarse. Si compartiéramos todo eso, las cosas irían mucho mejor”, dijo.
Le recomendamos: Colombiana fue asesinada en Florida, Estados Unidos
Luego de Lucile Randon, es Jeanne Calment quien tiene el récord de la mayor edad confirmada alcanzada por cualquier ser humano, habiendo fallecido en Arles, Francia en el año 1997 a la edad de 122 años.