Países de la UE abordarán medidas para aplicar paz en Ucrania y crisis libia
En la agenda de los responsables de Exteriores también se incluye la revisión estratégica de la política europea de exteriores y seguridad
EFE
Los ministros de Exteriores de la Unión Europea (UE) abordarán en una reunión informal este viernes y sábado en Riga posibles medidas con las que apoyar la aplicación de los acuerdos de Minsk, encaminados a pacificar el este de Ucrania, y la crisis política en Libia, entre otros asuntos.
Además de analizar la situación en Libia, la crisis en Ucrania y las deterioradas relaciones con Rusia a raíz de ese conflicto, los responsables de Exteriores de la UE iniciarán los preparativos de la cumbre con los países de la Asociación Oriental que tendrá lugar en la capital letona en mayo.
En su agenda también se incluye la revisión estratégica de la política europea de exteriores y seguridad o la actualización de la política de vecindad.
Los Veintiocho, bajo la presidencia letona de la UE, han previsto una sesión con los ministros de Exteriores de los países candidatos a la adhesión a la Unión, en la que se hablará de la actualidad en la vecindad europea.
La reunión, en la que por su naturaleza informal los ministros no podrán tomar decisiones, estará presidida por la jefa de la diplomacia comunitaria, Federica Mogherini, y el ministro de Exteriores de Letonia, Edgards Rinkevics, como presidente de turno de la UE hasta el 30 de junio.
Por parte de España, acudirá a la cita el ministro de Exteriores y Cooperación, José Manuel García-Margallo.
Los ministros aprovecharán esta cita para intercambiar puntos de vista sobre las medidas que la UE podría adoptar para apoyar la aplicación efectiva de los acuerdos de paz de Minsk, acordados entre las autoridades ucranianas y los separatistas prorrusos.
Mogherini confirmó esta semana que la UE evaluará "medidas" e "instrumentos" para "facilitar el cumplimiento de los acuerdos de Minsk en un proceso ordenado y compartido".
"Yo ahora me centraría en qué puede hacer la UE, no solo esperar a ver si los acuerdos se respetan o no. Sino una contribución directa para cumplir algunos de estos puntos", dijo el miércoles Mogherini en una rueda de prensa en Bruselas.
La jefa de la diplomacia comunitaria confió entonces en que Rusia "vuelva a tener un comportamiento responsable, empezando por la implementación de los acuerdos de Minsk", y reafirmó que la UE continúa estudiando preparar más medidas frente a Moscú por su papel en ese conflicto.
Para Mogherini la evaluación del cumplimiento de esos acuerdos "no es totalmente negativa" ya que hay "más tranquilidad que justo antes o después" de cerrarse ese pacto, pero aseguró que "sigue habiendo violaciones del alto el fuego" mientras que la retirada de las armas pesadas de la línea de contacto "no se puede verificar".
En ese sentido, apuntó la posibilidad de "reforzar" la misión de observadores de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE).
Fuentes comunitarias indicaron a Efe que el reforzamiento de esa misión por parte de la UE será una de las medidas que estudien los ministros para contribuir a la aplicación de Minsk.
Según Mogherini, el asunto será abordado por los ministros en estos dos días de reuniones informales y que volverá a ser tratado en el consejo de Exteriores del 16 de marzo en Bruselas "con miras a" la cumbre de líderes europeos de los días 19 y 20.
La reunión de Riga se produce también días después de que el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, participara en una videoconferencia con los líderes de Estados Unidos, Francia, Alemania, Reino Unido e Italia, en la que declararon su apoyo a los compromisos de Minsk y a la supervisión de la OSCE.
A su vez, declararon que hay una "estrecha vinculación entre sanciones y la total aplicación" de esos acuerdos, y afirmaron que decidirán sobre la aprobación de más medidas restrictivas "si se siguen violando".
En esa conferencia los líderes también manifestaron su "grave preocupación" por el deterioro de la situación en Libia, que según Tusk se analizará también en la cumbre europea de marzo.
La UE sigue centrada en respaldar los esfuerzos de mediación de la ONU entre las diferentes facciones libias para impulsar un gobierno de unidad en el país y que se ponga fin a la violencia, mientras mantiene su preocupación por el avance de los terroristas del Estado Islámico (EI) en ese país magrebí.
"Hay que ver cómo construir unas autoridades en Libia que tengan el control en el territorio, en tierra y mar", dijo Mogherini esta semana.
Los ministros de Exteriores de la Unión Europea (UE) abordarán en una reunión informal este viernes y sábado en Riga posibles medidas con las que apoyar la aplicación de los acuerdos de Minsk, encaminados a pacificar el este de Ucrania, y la crisis política en Libia, entre otros asuntos.
Además de analizar la situación en Libia, la crisis en Ucrania y las deterioradas relaciones con Rusia a raíz de ese conflicto, los responsables de Exteriores de la UE iniciarán los preparativos de la cumbre con los países de la Asociación Oriental que tendrá lugar en la capital letona en mayo.
En su agenda también se incluye la revisión estratégica de la política europea de exteriores y seguridad o la actualización de la política de vecindad.
Los Veintiocho, bajo la presidencia letona de la UE, han previsto una sesión con los ministros de Exteriores de los países candidatos a la adhesión a la Unión, en la que se hablará de la actualidad en la vecindad europea.
La reunión, en la que por su naturaleza informal los ministros no podrán tomar decisiones, estará presidida por la jefa de la diplomacia comunitaria, Federica Mogherini, y el ministro de Exteriores de Letonia, Edgards Rinkevics, como presidente de turno de la UE hasta el 30 de junio.
Por parte de España, acudirá a la cita el ministro de Exteriores y Cooperación, José Manuel García-Margallo.
Los ministros aprovecharán esta cita para intercambiar puntos de vista sobre las medidas que la UE podría adoptar para apoyar la aplicación efectiva de los acuerdos de paz de Minsk, acordados entre las autoridades ucranianas y los separatistas prorrusos.
Mogherini confirmó esta semana que la UE evaluará "medidas" e "instrumentos" para "facilitar el cumplimiento de los acuerdos de Minsk en un proceso ordenado y compartido".
"Yo ahora me centraría en qué puede hacer la UE, no solo esperar a ver si los acuerdos se respetan o no. Sino una contribución directa para cumplir algunos de estos puntos", dijo el miércoles Mogherini en una rueda de prensa en Bruselas.
La jefa de la diplomacia comunitaria confió entonces en que Rusia "vuelva a tener un comportamiento responsable, empezando por la implementación de los acuerdos de Minsk", y reafirmó que la UE continúa estudiando preparar más medidas frente a Moscú por su papel en ese conflicto.
Para Mogherini la evaluación del cumplimiento de esos acuerdos "no es totalmente negativa" ya que hay "más tranquilidad que justo antes o después" de cerrarse ese pacto, pero aseguró que "sigue habiendo violaciones del alto el fuego" mientras que la retirada de las armas pesadas de la línea de contacto "no se puede verificar".
En ese sentido, apuntó la posibilidad de "reforzar" la misión de observadores de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE).
Fuentes comunitarias indicaron a Efe que el reforzamiento de esa misión por parte de la UE será una de las medidas que estudien los ministros para contribuir a la aplicación de Minsk.
Según Mogherini, el asunto será abordado por los ministros en estos dos días de reuniones informales y que volverá a ser tratado en el consejo de Exteriores del 16 de marzo en Bruselas "con miras a" la cumbre de líderes europeos de los días 19 y 20.
La reunión de Riga se produce también días después de que el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, participara en una videoconferencia con los líderes de Estados Unidos, Francia, Alemania, Reino Unido e Italia, en la que declararon su apoyo a los compromisos de Minsk y a la supervisión de la OSCE.
A su vez, declararon que hay una "estrecha vinculación entre sanciones y la total aplicación" de esos acuerdos, y afirmaron que decidirán sobre la aprobación de más medidas restrictivas "si se siguen violando".
En esa conferencia los líderes también manifestaron su "grave preocupación" por el deterioro de la situación en Libia, que según Tusk se analizará también en la cumbre europea de marzo.
La UE sigue centrada en respaldar los esfuerzos de mediación de la ONU entre las diferentes facciones libias para impulsar un gobierno de unidad en el país y que se ponga fin a la violencia, mientras mantiene su preocupación por el avance de los terroristas del Estado Islámico (EI) en ese país magrebí.
"Hay que ver cómo construir unas autoridades en Libia que tengan el control en el territorio, en tierra y mar", dijo Mogherini esta semana.