A 27 años de la firma del Acuerdo de paz en El Salvador, la violencia persiste
En el aniversario de los acuerdos que pusieron fin a la guerra civil de 1992, el país centroamericano se enfrenta a una nueva coyuntura política enmarcada en las próximas elecciones, y a las masivas caravanas de migrantes que dejan su territorio.
- EFE
El Salvador celebró hoy el 27 aniversario de la firma de los Acuerdos de Paz que pusieron fin a la guerra civil en 1992 marcado por una coyuntura política que puede llevar al país a un giro histórico en los comicios de febrero, y la salida de una nueva caravana de migrantes hacia Estados Unidos.
En este contexto, el presidente salvadoreño, Salvador Sánchez Cerén, encabezó por última vez el acto central de la conmemoración del final de la guerra, dado que el próximo 1 de junio entregará el poder Ejecutivo a quien gane los comicios del 3 de febrero.
Las diferentes encuestas publicadas desde octubre pasado, cuando inició la campaña, prevén un nuevo declive electoral para la izquierda salvadoreña y muestran como ganador a Nayib Bukele, de la derechista Gran Alianza por la Unidad Nacional (Gana).
(Le recomendamos: Las otras crisis de Centroamérica)
Un estudio de lanUniversidad Francisco Gavidia (UFG) señala que "las encuestas ven a Bukele cerca de ganar en primera vuelta" los comicios presidenciales con el 53 por ciento de los votos válido.
El análisis coloca en el segundo lugar a Carlos Calleja, de la opositora Alianza Republicana Nacionalista (Arena, derecha) con el 30,7 por ciento, y a Hugo Martínez, del gobernante Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) en el tercer puesto con un 14,1 por ciento.
El triunfo de Bukele supondría un giro histórico en la política salvadora al romper con el bipartidismo de Arena y el FMLN, que se han disputado la Presidencia desde 1994.
(Ver más: ¿Por qué la realidad de las pandillas está lejos de acabarse?)
Sánchez Cerén, ante cientos de empleados públicos, miembros de las fuerzas de seguridad, sobrevivientes de la guerra y signatarios de los Acuerdos de Paz, centró su discurso en el legado de diálogo que, dijo, deja su Administración.
"Nuestra gestión se cimentó en la búsqueda de entendimientos y compromisos comunes, lo que ha sentado un precedente para una función pública más efectiva", apuntó el jefe de Estado, quien aseguró que propondrá a su sucesor mantener los mecanismos de diálogo ciudadano.
El excomandante guerrillero del FMLN destacó que los Acuerdos de Paz "inspiran a continuar trabajando por un país más democrático, y seguir fortaleciendo el diálogo", por lo que llamó a los salvadoreños a "no retroceder en lo avanzado".
En el discurso del presidente, a diferencia de años anteriores, no estuvo presente el tema de migración ni de la violencia, situaciones que también marcaron la fecha.
(Ver más: Así avanza la nueva caravana migrante que se dirige a Estados Unidos)
Una nueva caravana de al menos 100 salvadoreños, incluidos niños y adolescentes, partió este miércoles de San Salvador con rumbo a Estados Unidos y se sumaron a los miles de centroamericanos que iniciaron la travesía a la nación centroamericana desde finales de octubre pasado.
Según los datos oficiales, la reunificación familiar, la búsqueda de mejores oportunidades económicas y la violencia criminal son los principales motivos de la migración irregular.
Por otra parte, la celebración de la paz se dio en momentos en que el país registra una alza de los asesinatos como parte de una "acción deliberada" de la Mara Salvatrucha (MS13), de acuerdo con el director de la Policía, Howard Cotto.
En los primeros 15 días de 2019 el país registró un alza del 1,9 por ciento de los homicidios, situación que rompe con la tendencia a la baja que registraba desde julio pasado.
El Salvador celebró hoy el 27 aniversario de la firma de los Acuerdos de Paz que pusieron fin a la guerra civil en 1992 marcado por una coyuntura política que puede llevar al país a un giro histórico en los comicios de febrero, y la salida de una nueva caravana de migrantes hacia Estados Unidos.
En este contexto, el presidente salvadoreño, Salvador Sánchez Cerén, encabezó por última vez el acto central de la conmemoración del final de la guerra, dado que el próximo 1 de junio entregará el poder Ejecutivo a quien gane los comicios del 3 de febrero.
Las diferentes encuestas publicadas desde octubre pasado, cuando inició la campaña, prevén un nuevo declive electoral para la izquierda salvadoreña y muestran como ganador a Nayib Bukele, de la derechista Gran Alianza por la Unidad Nacional (Gana).
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Un estudio de lanUniversidad Francisco Gavidia (UFG) señala que "las encuestas ven a Bukele cerca de ganar en primera vuelta" los comicios presidenciales con el 53 por ciento de los votos válido.
El análisis coloca en el segundo lugar a Carlos Calleja, de la opositora Alianza Republicana Nacionalista (Arena, derecha) con el 30,7 por ciento, y a Hugo Martínez, del gobernante Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) en el tercer puesto con un 14,1 por ciento.
El triunfo de Bukele supondría un giro histórico en la política salvadora al romper con el bipartidismo de Arena y el FMLN, que se han disputado la Presidencia desde 1994.
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Sánchez Cerén, ante cientos de empleados públicos, miembros de las fuerzas de seguridad, sobrevivientes de la guerra y signatarios de los Acuerdos de Paz, centró su discurso en el legado de diálogo que, dijo, deja su Administración.
"Nuestra gestión se cimentó en la búsqueda de entendimientos y compromisos comunes, lo que ha sentado un precedente para una función pública más efectiva", apuntó el jefe de Estado, quien aseguró que propondrá a su sucesor mantener los mecanismos de diálogo ciudadano.
El excomandante guerrillero del FMLN destacó que los Acuerdos de Paz "inspiran a continuar trabajando por un país más democrático, y seguir fortaleciendo el diálogo", por lo que llamó a los salvadoreños a "no retroceder en lo avanzado".
En el discurso del presidente, a diferencia de años anteriores, no estuvo presente el tema de migración ni de la violencia, situaciones que también marcaron la fecha.
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Una nueva caravana de al menos 100 salvadoreños, incluidos niños y adolescentes, partió este miércoles de San Salvador con rumbo a Estados Unidos y se sumaron a los miles de centroamericanos que iniciaron la travesía a la nación centroamericana desde finales de octubre pasado.
Según los datos oficiales, la reunificación familiar, la búsqueda de mejores oportunidades económicas y la violencia criminal son los principales motivos de la migración irregular.
Por otra parte, la celebración de la paz se dio en momentos en que el país registra una alza de los asesinatos como parte de una "acción deliberada" de la Mara Salvatrucha (MS13), de acuerdo con el director de la Policía, Howard Cotto.
En los primeros 15 días de 2019 el país registró un alza del 1,9 por ciento de los homicidios, situación que rompe con la tendencia a la baja que registraba desde julio pasado.